La U. Agraria promueve el bienestar animal
El maltrato no es solamente golpear a un perro, también involucra olvidar sus cuidados, no sacarlo a pasear y privarlo de atenciones adecuadas. Tener un animal y dejar que deambule en las calles, como ocurre en algunos sectores de la ciudad, pone en riesgo su vida y por ello existen casos de perros atropellados que llegan a la Clínica Veterinaria de la Universidad Agraria del Ecuador.
La carrera de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Agraria, además de contar con su propia clínica veterinaria, constantemente promueve acciones comunitarias a través de sus alumnos, para que impartan los conocimientos aprendidos en las aulas de clases a diferentes barrios y comunidades.
En 2018 se abrió la carrera de Veterinaria en Milagro y en esa ciudad se detectó la falta de concienciación sobre el cuidado animal.
Eso generó que con el aval del doctor Jacobo Bucaram Ortiz se establezcan brigadas médicas veterinarias vespertinas y hasta nocturnas para fomentar los respectivos chequeos que deben realizar a mascotas.
Beatriz Bucaram de Amador, quien dirige el área de voluntariado de la Universidad, considera que la atención personalizada tiene más efectividad que las charlas. Porque cada mascota requiere una atención distinta.
Descubrir que una familia tenía 5 perros y 3 gatos era común, de ahí surge la necesidad de orientar a los dueños según cada caso. “Muchos desconocen que el tener un animalito en el hogar involucra responsabilidades y cuidados, para evitar que los más pequeños de la casa contraigan sarnas o enfermedades por medio de parásitos”, agrega Bucaram.
Entre los problemas comunes de los animales sobresalen: la desnutrición, desaseo, mal cuidado del pelaje, orejas sucias, gatos no castrados e incluso malas prácticas médicas.
En casos extremos que requerían cirugía, se acompañaba al dueño en el proceso, direccionándolo a clínicas especializadas con costos accesibles.
El voluntariado logró atender alrededor de 3.000 animales, gracias a brigadas conformadas por voluntarios y estudiantes de la carrera.
Ellos ofrecieron de forma gratuita atención y desparasitación, acompañada de los respectivos consejos para que sigan el tratamiento adecuado.
Siempre se espera encontrar animales en mal estado en las calles, creyendo que los que tienen un hogar están bien cuidados, pero la realidad es otra, la falta de interés y el abandono total son evidentes. Bucaram dice que de cada 150 perros atendidos, solo dos estaban bien tratados y esto sin considerar los canes callejeros.
Además aseguró que como los municipios no se abastecen, lo más viable es unirse a entidades privadas para llegar a más sectores. “Estamos predispuestos a trabajar en conjunto porque contamos con docentes especializados que pueden colaborar en brigadas médicas veterinarias”.
Este tipo de proyectos demuestra que la universidad no solo está llamada a suplir las demandas académicas, sino también a colaborar con la ciudadanía. A pesar de que las brigadas no tienen costo, se necesita de auspiciantes que estén dispuestos a colaborar para que sea un proyecto sustentable a largo plazo y así promover la calidad de vida de las mascotas.
Las brigadas continuarán en Milagro durante todo el año, para seguir fomentando el cuidado animal desde casa y así mismo la educación entre los estudiantes, guiados por sus tutores expertos en el tema, como los doctores Israel Márquez y John Luna, docentes de la carrera de veterinaria, además del apoyo del grupo de voluntarios.
El voluntariado académico de la Universidad Agraria se inició desde 2012, fue fundado por Jacobo Bucaram Ortiz con el objetivo de suplir necesidades según las requiera el país. Existen muchas formas de ejercer esta actividad y una de ellas es el ámbito académico, por su alcance estudiantil y social.
Entre los principios básicos para el bienestar de los animales de casa sobresalen estar libres de hambre, sed, miedos, angustias, incomodidades físicas, dolores, enfermedades. Además, se recomienda no medicarlos sin la supervisión de un veterinario. La falta de conocimiento desde casa provoca las enfermedades.
Juan Manuel Di Luca, médico veterinario de la clínica agraria desde 2015, recomienda llevarlos al veterinario para la respectiva evaluación porque a pesar de que perros y gatos son aptos para convivir con humanos, eso no significa que deban ser cuidados como una persona. “No se les puede dar sobras de la última comida o prepararles sopa, aparentemente saludable, porque aumentan el riesgo de problemas hepáticos”. (I)