El papa Francisco decidió hoy no sujetarse al protocolo y no leer el discurso que tenía preparado para obispos y sacerdotes en El Quinche (nororiente de Quito). Fue cuando improvisó un discurso, en donde confesó que le llamó la atención  la devoción de los ecuatorianos, "desde los más viejitos hasta la guagua ponen las manitos esperando la bendición", dijo el santo padre. 

El sumo pontífice cree que esa devoción y esa "receta" se debe a la consagración de Ecuador al Corazón de Jesús. "Toda esta riqueza espiritual, la piedad, viene de haber tenido la valentía de consagrar la Nación al Corazón de Jesús".

El papa Francisco realizó su séptimo y último discurso en el El Quinche, antes de dejar el país. A las 12:42, el sumo pontífice abordó el avión de Boliviana de Aviación, que lo trasladará a ese país. En el aeropuerto de Tababela fue despedido por el presidente Rafael Correa, su esposa Anne Malherbe, además de varios ministros de Estado, entre ellos el vicepresidente Jorge Glas. 

Una calle de honor de niños con trajes típicos del país despidió al santo padre, quien se despidió uno por uno de los muchachos, quienes rompieron el protocolo. La Orquesta Sinfónica Juvenil interpretó los himnos del Vaticano y de Ecuador. 

Francisco cree que consagración al Corazón de Jesús diferencia al Ecuador

Durante su intervencion ante el mundo consagrado en El Quinche, el papa Francisco les pidió gozar de las virtudes de la gratuidad, memoria, gozo y alegría.  Pidió no caer en la enfermedad, "medio peligrosa, que es el alzheimer espiritual".

También pidió no renegar de las raíces. "No te olvides de la fe de tu abuela y de tu madre", dijo, así mismo pidió "no sentirse más importantes".

"Es triste cuando uno ve a una consagrada que en su casa hablaba la lengua y cuando se olvidan y no quieren hablar (...) Dios me sacó para servir", agregó.

Pidió a los obispos y sacerdotes no cobrar por las gracia. Pidió a Dios seguir bendiciendo al pueblo ecuatoriano "al que ustedes deben servir", afirmó a los obispos y sacerdotes.

Finalmente pidió a los sacerdotes que no se olviden de rezar por él, "porque yo también siento la tentación de olvidarme de la gratuidad y mis raíces", dijo. 

Recorrió El Quinche en papamóvil

A las 10:30, el papa Francisco llegó a El Quinche. Antes de ingresar a la parroquia cambió el vehículo sencillo gris de su gira por Ecuador por el papamóvil.

El Santo Padre recorrió la parroquia bendiciendo a los pobladores que, a su paso, le lanzaron pétalos de rosas.

Al llegar a la iglesia, el papa Francisco colocó un ramo de flores a los pies de la imagen de la virgen de El Quinche. Rezó por unos minutos y luego le colocó un rosario. También firmó el libro de visitas del templo.

En el campo mariano, en donde los feligreses pernoctaron desde el martes, el Papa se reunió con los obispos del país.

Antes de que llegue el papa Francisco, diversos grupos musicales interpretaron  temas religiosos dentro del campo, al que ingresaron con invitación. También realizaron lecturas y rezos. Algunos incluso se ubicaron encima del muro para tener una vista directa al lugar donde se ubicará el Papa.

El control policial es total en la zona. Los peregrinos, que observaron a Francisco por las calles de El Quinche, esperaron desde las veredas, luego de pasar la noche en carpas, cartones o cubiertos por plásticos.

Todo el perímetro urbano por donde pasó el papamóvil está cerrado. En el parque central se adecuaron cerca de 300 sillas. En todos los alrededores de El Quinche hay ventas ambulantes con objetos religiosos con la imagen del Papa. El clima en el lugar es templado.

Emoción en discursos de representantes católicos

Enorme emoción causó en los representantes de la iglesia católica la reunión que tuvieron hoy con el papa Francisco en el campo mariano de la iglesia de El Quinche.

El primero en pronunciar su discurso fue el brasileño Celmo Lazzari, obispo de Sucumbios, quien es uno de los últimos obispos que llegó del exterior al Ecuador.

"Aquí estamos los sacerdotes y diáconos del clero. El territorio de Ecuador es reducido comparado a otras naciones de América Latina, pero tiene la mayor biodiversidad y la exhuberancia de la Amazonía que pide socorro y usted es uno de los defensores con la encíclica que nos ha escrito de construir la unidad nacional en la biodiversidad", afirmó Lazzari.

El obispo además pidió al Papa que deje su receta de ánimo. "Ver su alegría a pesar de las múltiples responsabilidades que tiene sobre sus espaldas nos alienta a imitarlo. Déjenos su receta santo padre".

Por su parte el vicario apostólico de Esmeraldas, Silvano Mina, resaltó la alegría que sienten los sacerdotes por la presencia del pontífice y que les empuja a volver al entusiasmo de su consagración.

"Tenga la certeza de que usted con su misterio petrino ha logrado que nuestras vidas vuelvan a llenarse de pasión por el evangelio. Queremos ser fieles hoy más que nunca a nuestra misión. queremos ser presencia viva de las escritura. (I)