El pan es un alimento básico para los ecuatorianos. Hasta 2017 era el producto alimenticio que más se consumía a escala nacional. La información consta en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2016 - 2017, del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

Existen muchas familias que tradicionalmente han dedicado sus vidas a su elaboración como los Lara.

Ahí nació don Nicolás Lara Heredia, quien es el actual presidente de la Asociación de Panaderos del Guayas, sede ubicada en Capitán Nájera 604 y Coronel.

“Hace al menos cuatro décadas mi bisabuelo, luego mi abuelo, mi papá, hermanos e hijos vinimos con el oficio de amasar panes. Si bien no es una profesión, pero sí un oficio que si lo cuidas y te esfuerzas puede convertirse en una empresa”, destaca Lara Heredia. 

Una de las claves para que el negocio haya perdurado en el tiempo ha sido la variedad que se ofrece al cliente.

Diego Lara, hijo de Nicolás, puso en la carta pan con chocolate, también los salados de corteza y el francés son los más pedidos de los clientes.

La Sociedad Unión de Panaderos aglutina a todos los maestros panificadores, su creación fue el 1 de diciembre de 1898. Una de las asociaciones más antiguas del país.

Para los más de 200 socios del gremio las panaderías son un motor económico en las clases populares, ya que generan empleo. En Guayas hay más de 3.500 de ellas, 2.200 están en Guayaquil.

“Antes había más personal debido a que la producción era mayor”.

Los miércoles, desde  las 15:00, hay asambleas extraordinarias. Aquí se arman talleres para capacitar  a ciudadanos interesados en emprender este negocio.

En ellos se instruye sobre panaderías, decorados, dulcería y pasos básicos para cocinar tortas.

“Hago la invitación a que se afilien y que puedan perfeccionar su técnica. La capacitación dura un mes y cuesta $ 5. Yo empecé a los 10 años y les puedo asegurar que esto es un arte que puede generar más trabajo”, concluyó el panadero, de 55 años. (I)