Hablar de la muerte con sinceridad es lo mejor
Comunicarle a un niño la muerte de un ser querido suele resultar complicado. La familia de José Suárez lo experimentó hace poco tiempo. No sabía cómo consolar a su hija, de cinco años, luego del fallecimiento del abuelo.
Él intentaba distraerla para que se olvidara del tema. Sin embargo, los especialistas aconsejan que lo mejor es decirle la verdad de lo ocurrido.
Una de las recomendaciones, según el psicólogo Eduardo Sánchez, es contarle la verdad al menor de edad sin metáforas complicadas. Eso -señala- los puede confundir.
Por ejemplo, se debe indicarle claramente que el familiar murió y que no van a poder verlo más. Hablarles de los momentos felices que han pasado y que siempre estará en la mente.
Asimismo, algunos expertos recomiendan buscar un momento oportuno para hablar del tema. Una opción es hacerlo mientras se aprecia un programa de televisión o una película. Mauricio Larrea, terapeuta, indica que se debe conversar sobre el proceso de la vida y que es natural que las personas mueran. A la vez plantea expresarles que sus padres lo aman y que estarán con ellos. Y que existen más miembros que lo quieren y lo cuidarán en caso de que ocurra algo.
Uno de los errores recurrentes es esconder la verdad a los menores de edad para no ponerlos tristes. Pero lo mejor es abordar el asunto con naturalidad. Si no se lo hace de esa manera, los niños quedarán más confundidos. Es mejor hablar de las emociones y no ocultarlas. (I)