María Elva Valverde tiene 68 años de edad y desde hace 20 perdió la movilidad de su brazo izquierdo, luego de que un auto la atropellara. Ella vive en el barrio El Palmar, ubicado al noroeste de Esmeraldas y es una de las 9.496 personas con discapacidad que la Misión Manuela Espejo, de la Vicepresidencia de la República, detectó durante el año 2010.

Su lesión le ha impedido conseguir un trabajo que le ayude a  la crianza de su nieto que desde pequeño quedó huérfano y que ahora, 18 años después, trabaja en la pesca para ayudar a su abuela y a su tía con quienes vive.

Antes del accidente, doña Elva lavaba y planchaba ropa ajena para cubrir los gastos de la casa. En la actualidad es su nuera quien se encarga de ese trabajo y es el sostén de la familia, que hasta hace pocos días vivía en una pequeña casa de cemento y caña que construyó su hijo poco antes de morir.

“Era una casita vieja con pocos muebles, teníamos lo justo”, manifestó mientras recibía a la brigada técnica de la Misión Manuela Espejo que llegó ayer hasta su barrio para dar asistencia a ella y a los vecinos que fueron identificados con algún tipo de discapacidad.

Como parte de la visita, médicos especialistas le realizaron un nuevo chequeo para constatar si su salud se está deteriorando y descartar cualquier otra enfermedad.

La beneficiada fue ubicada a través del Consejo Nacional de Discapacidades, Conadis, cuando fue a realizar el trámite para obtener el carné de personas que otorga esa entidad a esta población.

Alberto Sánchez, uno de los brigadistas, explicó que pese a que las brigadas recorren todo el país, otra de las metodologías de detección es a través de esa entidad. “El Conadis tiene una base de datos que nos sirve de guía para ubicar a las personas de una manera más fácil”, dijo.

Solamente en esta provincia, la Misión Manuela Espejo prevé entregar más de 12.500 ayudas técnicas y enseres, entre los que se incluyen bastones, sillas de ruedas de distintos tipos, muletas, camas, colchones, kits antiescaras. Además de viviendas y la entrega de bonos Joaquín Gallegos Lara, que consisten en una ayuda económica mensual de 240 dólares.

En Esmeraldas, como en casi todas las provincias del país, la mayoría de casos de discapacidad corresponde a la de tipo intelectual. Esto se debe, según Milton Yulán, médico brigadista, a que al ser zonas de extrema pobreza, las mujeres, cuando están en  período de gestación, no  reciben atención prenatal.

En consecuencia esto provoca que, al momento de los partos, las madres lleguen e condiciones críticas y que los bebés presenten complicaciones, como la hipoxia cerebral.

Esta afección hace que el cerebro se quede sin la cantidad de oxígeno que requiere para bombear sangre y provoca discapacidades cerebrales.

A nivel nacional, según datos de la Vicepresidencia, se ubicaron casi 300 mil personas con  discapacidad, de las cuales 26.300 se consideraron casos  críticos.

Del total de casos detectados, el 36% corresponde a personas con discapacidad físico-motora; 28,5% presenta discapacidad mental o intelectual; 11,5%, problemas auditivos; y el 9,31%, complicaciones visuales.

Las provincias con mayor índice de personas con discapacidad son: Bolívar (3,30%), Cotopaxi (3,16%), Chimborazo (3.05%) y Zamora (3%).

Hasta el momento, la misión entregó más de 77.000 ayudas técnicas. Entre otra de las acciones que incluyen la fase de respuesta, está la construcción de centros de atención integral, que son espacios en donde las personas con discapacidad pueden acudir para recibir tención permanente. Se tiene previsto inaugurar uno en cada provincia.

Para este año, el Gobierno central tiene previsto invertir alrededor de 80 millones de dólares para cubrir las necesidades de las personas con discapacidad a nivel nacional. Las siguientes visitas de 10 brigadas que se realizarán en los próximos días son Manabí, Pichincha y Guayas, provincias en las que se han registrado 27.723, 45.098 y 74.833 personas con discapacidad, respectivamente.