En un hecho sin precedentes y que se espera genere una serie de consecuencias y cambios en Chile, un miembro activo de la Armada chilena (Marina) declaró públicamente su homosexualidad. En un país aún conservador como Chile, la declaración del marino generó revuelo. “Las personas que somos homosexuales no tenemos por qué estar escondidas, podemos pertenecer a cualquier rama”, afirmó el uniformado Mauricio Ruiz.

Este marino hizo su declaración desde la sede del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), un organismo que desde 1991 defiende los derechos humanos de gays y cuyas intervenciones suelen tener un importante impacto en Chile. La relevancia del reconocimiento de Mauricio Ruiz, de 24 años, tiene que ver también porque lo hizo con el aval de la Armada.

En una conferencia de prensa a la que asistió EL TELÉGRAFO, Ruiz –vestido de civil- contó que en lo personal fue extremadamente difícil tomar esta decisión. Incluso, dijo que su pareja no quería que él “saliera del clóset” por temor a represalias posteriores. “Las personas homosexuales podemos pertenecer a cualquier rama (de las Fuerzas Armadas) y nos merecemos todo el respeto como cualquier persona”, indicó el marino, quien trabaja en el área de operaciones de la Armada chilena, en la ciudad portuaria de Valparaíso. “No es cierto que un homosexual vaya a salir corriendo y que se agarre el pelo cuando haya guerra”, agregó.

Hasta la sede del Movilh acudió el diputado socialista de la Nueva Mayoría, Marcelo Schilling, quien dijo: “estoy aquí para respaldar la oficialidad de la Armada que permite que esta situación funcione y estoy para decirle a los diputados homofóbicos que el valor no tiene nada que ver con las opciones sexuales”.

“Aceptarme es saber que tengo corazón. Decir que soy homosexual es un beneficio personal y familiar. Lo único que debe importar es nuestro amor y el servicio por la patria”, dijo Mauricio Ruiz en su cuenta de Twitter. Esta acción coincide en el marco de los diálogos entre las Fuerzas Armadas y los movimientos homosexuales para erradicar la discriminación al interior de estas.

El hecho de que un miembro activo de las Fuerzas Armadas declare su homosexualidad podría ser el inicio de un eventual cambio en esta materia. Si bien parte de la sociedad chilena es homofóbica, en instituciones como el Ejército o la Armada ha habido en las últimas décadas un rechazo más acentuado con respecto a los gays. A juicio del director del Movilh, Rolando Jiménez, “hoy día en Chile los cuarteles empiezan a salir del clóset (armario)”. Además, Jiménez destacó la “valentía” del marino y dijo que, según estimaciones internacionales, en las ramas de las Fuerzas Armadas suele haber entre un 7% y 10% de homosexuales.

En 2012, el Ejército chileno realizó una encuesta interna que arrojó que el 96,6% de los encuestados no está de acuerdo el ingreso de homosexuales en las filas castrenses, mientras que el 3,4% respondió de manera afirmativa. A su vez, el 64% dijo que “la homosexualidad es incompatible con la disciplina de la carrera militar”, mientras que un 23% señaló que “con la integración de homosexuales en el Ejército se podría poner en riesgo el espíritu” de la institución.

La declaración de Mauricio Ruiz revela también que las cosas están cambiando en Chile. De partida, en 2012 se aprobó una ley antidiscriminatoria (conocida como ley Zamudio por el caso de una golpiza a un joven homosexual que derivó en su muerte), que establece medidas sancionatorias contra las discriminaciones arbitrarias y un procedimiento judicial para restablecer los derechos cuando se cometa un acto de este tipo.

Al mismo tiempo, desde 2010 se analiza en el Congreso un proyecto para legalizar los matrimonios gays o al menos las uniones civiles. Chile no reconoce ningún tipo de relación entre parejas del mismo tiempo. Aparte de Chile, en Sudamérica no se reconocen sus derechos a los homosexuales en Bolivia, Perú, Paraguay y Venezuela. El resto de los países tiene interpretaciones distintas.

En Argentina, Uruguay y Brasil, está permitido el matrimonio gay, mientras que Ecuador acaba de oficializar que los homosexuales podrán inscribir sus uniones de hecho en sus documentos de identidad.

DATOS

En Chile la Iglesia católica aún tiene un enorme poder social, aunque en los últimos años los chilenos se han atrevido a manifestar sus posturas sexuales.

Otras revelaciones al interior del Ejército ocurrieron en EE.UU., donde Zachary Werth y Dustin Hiersekorn admitieron su homosexualidad cuando formaban parte de las fuerzas terrestres.

En 2010 fueron expulsados del Ejército. Los altos oficiales alegaron razones falsas para  destituirlos. Luego del escándalo el gobierno de Barack Obama inculcó la política No preguntes, no cuentes.

Esta norma promueve la no discriminación de personas homosexuales en la Armada, sin importar su orientación.