Las agencias de viajes ya ofrecen paquetes de turismo religioso incluso desde bogotá hacia la capital ecuatoriana
Los hoteles de Guayaquil tienen el 10% de reservaciones por la visita del Papa
La visita del papa Francisco a Ecuador ya genera expectativas del sector turístico, cuyas empresas esperan el desplazamiento de viajeros locales. A un mes de la llegada del Sumo Pontífice, no hay proyecciones exactas de la cantidad de personas que podrían arribar al país del extranjero, y las que se movilizarán desde las provincias hacia Quito y Guayaquil.
Se estima que cada una de las 2 misas campales que ofrecerá el argentino atraería a 1,5 millones de personas. José Francisco Trujillo, jefe de marketing de la empresa de viajes en línea Buentrip.net, también tiene sus proyecciones: calcula un promedio de 600.000 personas que vendrá al puerto principal y, al menos, otro millón a Quito.
En este portal se ofertan paquetes desde $ 95 hacia Guayaquil, lo que incluye traslado del aeropuerto al hotel, una noche de alojamiento, desayuno y transporte al lugar donde se celebrará la misa campal, además de un city tour de cortesía. Y hay una oferta similar para Quito.
Según la Federación de Cámaras de Turismo del Ecuador (Fedecaptur), los hoteles han alcanzado hasta ahora un nivel de reservas del 10% en Guayaquil y un poco más en Quito debido a la visita del Papa.
Es un porcentaje bajo todavía, sobre todo si se calcula que los visitantes extranjeros hacen sus reservas con anticipación, señaló el presidente de la Fedecaptur, Holbach Muñetón.
Lea también: Francisco mueve el turismo en Paraguay y Bolivia
En Colombia, la visita de Francisco a Ecuador no ha pasado inadvertida. La agencia de viajes mayorista Bluetours ofrece en su página de Facebook paquetes desde $ 764, partiendo de Bogotá hacia Quito, para asistir a las actividades religiosas y hacer turismo por la ciudad.
Lorena Hortua, ejecutiva de la agencia colombiana, contó que la visita ha generado por el momento varias cotizaciones de los interesados.
El plan de Bluetours incluye tiquetes aéreos, traslados, desayunos, 3 noches de alojamiento y city tour. Otra posibilidad que apuntan los expertos es que los fieles, sobre todo colombianos y peruanos, opten por llegar por vía terrestre y por su cuenta.
En tal sentido, el Servicio Nacional de Aduana del Ecuador (Senae) ha implementado un sistema que disminuye los tiempos del trámite de ingreso de turistas por ambas fronteras. Esto causaría que los fieles podrían ingresar a Ecuador en apenas 4 minutos.
En lo que va del año, por Huaquillas, desde Perú, han ingresado 2.570 personas. Por Tulcán, desde Colombia, 5.432 ciudadanos.
La oferta de Buentrip.net hasta ahora ha tenido 60 visitas, de estas se generaron 5 llamadas y apenas 2 compras efectivas, por lo que Trujillo considera que no se venderán muchos paquetes.
El ejecutivo lo atribuye a una tendencia del ecuatoriano de realizar los viajes de la forma más barata. “Muchos buscan llegar a la casa de un primo, un tío o un amigo, lo que importa es ahorrarse la tarifa hotelera que viene a ser lo más caro de las estadías”, apuntó.
Por ejemplo, Danilo Herrera, excatequista de Latacunga, optó por pedir posada. Viajará a Quito con su esposa e hijos un día antes de la misa papal y dormirá en la casa de algún pariente esa noche.
Según datos de la Gobernación de Cotopaxi, ya se ha confirmado la salida de cerca de 1.000 personas, la mayoría es de representantes de colegios católicos, que viajarán en comitiva y con ayuda económica para el traslado.
La fe generó ingresos en Brasil
Durante la pasada visita del Papa a Río de Janeiro, en 2013, la mayoría de peregrinos rechazó los hoteles, al considerarlos caros. El 55,7% de los fieles durmió en parroquias e instalaciones eclesiásticas. El resto eligió viviendas de amigos, parientes o residencias de voluntarios que participaron en la organización del evento. A Brasil llegaron 2 millones de turistas.
El hecho de que eventos de este tipo sean únicos y no generen estadísticas, hace que el principal de la Fedecaptur lo considere impredecible. Lo que sí hay son antecedentes de otros países.
Hace 2 años Brasil recibió 2 millones de turistas durante la Jornada Mundial de la Juventud, evento en el que participó el papa Francisco. El Ministerio de Turismo del país carioca informó entonces que la visita generó $ 531,9 millones en Río de Janeiro, donde se desarrollaron los eventos.
Si bien la ciudad no es comparable en tamaño y población con Quito y Guayaquil, afirmó el principal de Fedecaptur, lo que sí es cierto es que el periplo papal tendrá un impacto económico y de desplazamiento de turistas locales superior al de un feriado nacional.
El último carnaval en Ecuador movilizó a 1’059.000 turistas y generó una actividad económica de $ 87 millones. “Solo en el parque Samanes de Guayaquil se concentrarán un millón de personas” en la misa papal.
Ante esta situación Aldo Salvador, director ejecutivo de la Cámara Provincial de Turismo de Pichincha (Captur), consideró que un eventual feriado es una “buena noticia” porque permitirá que las personas se organicen y lleguen un par de días antes para encontrar oportunamente los servicios necesarios. Por ahora se espera que el Gobierno ecuatoriano oficialice los días de asueto, que serán parciales y focalizados por región, y probablemente tendrán que recuperarse.
Muñetón confió en que, debido a la costumbre de dejar todo para última hora, las próximas semanas los hoteles, en todas sus categorías, tengan una máxima ocupación.
Desde una perspectiva comercial, un evento religioso de tal magnitud atrae a un grupo objetivo variable: desde las personas de escasos recursos hasta las clases más acomodadas, por lo que, para Muñetón, el beneficio lo verán los hoteles en esa misma escala.
El costo máximo de una noche en una habitación sencilla en hoteles como Sonesta de Guayaquil es de $ 236, en el Grand Hotel Guayaquil es $ 220,el Wyndham es $ 237. Otros, como el Ramada, tienen tarifas de $ 68. “La fe mueve todos los estratos”, señaló el dirigente gremial, y aunque es políticamente incorrecto hablar de ganancias económicas en un evento religioso, de cualquier manera esto ocurre. Desde el vendedor de agua en el parque, las empresas de transporte, la comerciante de medallitas e imágenes de Francisco reciben más ventas. “Es inevitable”, aseguró.
Sobre si el sector hotelero está preparado o no para atender la llegada masiva de turistas, las posiciones son diversas. Trujillo considera que falta por lograr mayor calidad en la atención. “La demanda estará, pero la calidad, ya sea de alimentos o de hospedaje, bajará para los que lleguen al último. Pensamos que habrá escasez en muchos sectores”, apuntó Trujillo.
De hecho la falta de infraestructura hotelera es un problema cada vez más importante de Guayaquil, sobre todo ahora que se posiciona como destino turístico internacional. Está previsto que el Papa permanezca en Ecuador los días 6, 7 y 8 de julio para oficiar misas en Guayaquil y Quito. (I)