Los centros infantiles se reinventan de cara a reanudar sus actividades
Con el retorno paulatino de los padres de familia a los respectivos trabajos en el sector público desde hoy (25% de servidores), no solo está latente la preocupación frente al contagio del covid-19, sino también lo referente al cuidado de sus infantes, su estabilidad emocional, seguridad, higiene y nutrición.
Pero, también están conscientes de que, con pandemia o sin ella, la vida debe continuar y no pueden tampoco dejar de lado el desarrollo psico-motriz de sus niños o niñas.
De allí que parvularias como Carla Castillo (29), de un centro infantil del sur de Quito, dijo que lo recomendable, hoy más que nunca, es trabajar de manera coordinada con quienes cuidan de los pequeños, y de ser el caso con centros infantiles públicos o privados, para evitar contradicciones en el importante proceso de formación y desarrollo de los infantes.
Resaltó que esta es la etapa más importante de los niños y niñas de cero a seis años, ya que es cuando la persona inicia la fase de aprendizaje, desarrollo psicomotriz, locomotriz, potencialidades intelectuales, coordinación corporal y el aspecto afectivo-social.
Pero, ante el impedimento de realizar jornadas presenciales en centros infantiles, se han readaptado para mantener el vínculo con los chicos mediante el acompañamiento virtual desde casa.
En ese sentido, las docentes Mónica Cuenca y Paola Segovia coincidieron en aclarar que el aprendizaje de niños en edad preescolar se da desde la experiencia, a través de los sentidos, por lo que realizar actividades virtuales constituye, de todas maneras, una limitante para los logros.
Es por ello que desde el inicio del confinamiento -dicen- han tenido que readaptar las actividades empleando diversos recursos, lo cual les ha permitido dar continuidad a los procesos de desarrollo alcanzados y, ante todo, mantener el vínculo efectivo.
“Desde mi experiencia, ha resultado un reto captar la atención de los niños y mantenerla durante las actividades, como el cuento o juegos, ya que al no tener contacto físico, la interacción es más complicada”, explicó Segovia.
Las medidas a adoptarse en los distintos centros infantiles consultados por este Diario, con una eventual apertura del servicio presencial, incluye la toma de pruebas PCR para detección del covid-19 a todo el personal.
Castillo cree que esta medida, sumada a las normas de bioseguridad y distancia social, contribuirán a detectar a tiempo posibles casos, adoptar acciones inmediatas y, sobre todo, dar cierta tranquilidad a padres.
Centros infantiles privados implementarán la atención personalizada en el domicilio de los pequeños cuyos padres y madres deben ir a laborar y no tienen con quién dejarlos, alternativa nacida desde ambas partes.
Será como que “la guardería va a tu casa”, iniciativa que surge en medio de la pandemia como forma de reactivarse. El Centro Infantil “Pakarina”, en el norte de Quito, será uno de los que adopte esta modalidad, pero igualmente bajo estrictos protocolos, medidas de bioseguridad y coordinaciones. (I)
"Hay que buscar el equilibrio entre trabajo, salud y el cuidado de infantes"
Carol López Solórzano, directora del Centro Infantil Pakarina
Los progenitores reconocen la importancia de la interacción social para el desarrollo de sus hijos.
¿Cómo acompañar a los menores en edad preescolar frente al retorno de los padres a sus trabajos tras el confinamiento?
Es posible que los niños y niñas experimenten un malestar emocional ocasionado por la separación. Resulta imprescindible un acuerdo previo entre los padres para establecer el manejo del proceso de readaptación y acompañamiento.
Es aconsejable adoptar estrategias en la familia para que la separación sea más llevadera para todos.
La siguiente guía plantea aspectos importantes como hablar con el niño o niña y explicarles las razones por las que los padres saldrán por horas.
¿Los representantes de niños en etapa preescolar consultan sobre la reapertura y cómo serán los procedimientos?
Sí, cada familia tiene necesidades diferentes y no siempre hay personas cercanas y de confianza que los ayuden con el cuidado.
Para ello, el soporte que el centro infantil les puede dar se vuelve determinante para realizar actividades, buscando el equilibrio entre trabajo, salud y cuidado de los hijos.
Hay miedo de los padres por la posibilidad de que los niños enfermen si salen de casa, pero saben que dejarlos solos o al cuidado de personas no capacitadas tampoco es la mejor opción. Ellos reconocen la importancia de la interacción social para el desarrollo de sus hijos...
Se analiza el poder abrir los servicios presenciales toda vez que los contagios se estabilicen en Quito, pero siguiendo las disposiciones del COE cantonal, los organismos de control y los consejos médicos. (I)