La Unesco alerta de que 200 millones de jóvenes no acaban la escuela primaria
Unos 200 millones de jóvenes de entre 15 y 24 años provenientes de países en desarrollo "ni siquiera" acaban sus estudios primarios, alertó hoy la Unesco en la presentación de su informe anual "Educación Para Todos".
En la edición 2012 del estudio de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) se puso de relieve la "apremiante necesidad" de invertir más en educación para dotar a estos jóvenes de competencias que les permitan acceder a un empleo digno.
Más de un 25 % de ellos "acaban aceptando puestos cuyos salarios los mantienen en el umbral de la pobreza" (1,25 dólares al día), señala la organización con sede en París.
El informe, elaborado para vigilar el cumplimiento de seis objetivos educativos a los que se comprometieron más de un centenar de países en Dakar (Senegal) en el año 2000, reveló que "el ritmo de la ayuda internacional al sector educativo se está desacelerando" y de hecho, en 2011 los fondos se redujeron por primera vez.
Aunque entre 1999 y 2010 el número de niños no escolarizados en el mundo descendió de 108 millones a 61, en los dos últimos años esa cifra "se ha estancado", y en regiones como África ha vuelto a aumentar, lamentó la directora del informe, Pauline Rose.
La principal responsable del estudio achacó esta situación a que, conforme se acercan los objetivos marcados, que incluyen la universalización de la educación primaria -con fecha tope en 2015-, los países donantes "pierden interés".
No obstante, las carencias en educación no son un problema exclusivo de los países en vías de desarrollo.
De hecho, basándose en datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), los autores del estudio calcularon que en los países desarrollados hay 160 millones de adultos "incapaces de leer un periódico o presentar una candidatura a un puesto de trabajo".
Es una situación "preocupante", según Rose, en un momento en el que el paro juvenil supera el 12 % en todo el mundo, motivo por el que la "grave falta de competencias" se ha vuelto "más nociva que nunca".
Por ello, señaló la necesidad de ofrecer "vías alternativas" a los jóvenes que abandonan prematuramente la escuela y fomentar programas educativos que proporcionen una "segunda oportunidad".
La Unesco calcula que para lograr la escolarización universal en el primer ciclo de educación secundaria en los países en desarrollo serían necesarios 8.000 millones de dólares complementarios a los 16.000 requeridos para el ciclo de primaria.
Ante la falta creciente de financiación, los autores del estudio llamaron al sector privado a incrementar su apoyo financiero, "habida cuenta de que es el primer beneficiario" de una mano de obra competente y cualificada.
Además, destacaron la urgencia de distribuir de una forma más adecuada la ayuda internacional a la educación que, en muchos casos, o bien se dedica a escolarizar a estudiantes extranjeros en los Estados desarrollados o bien se dirige a los llamados BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y no a los países más necesitados.
Los 3.100 millones de dólares asignados actualmente a la educación superior de los países pobres podrían gastarse "con mejor provecho" si se dedicaran a paliar el déficit de competencias de la juventud necesitada en sus países de origen.
Por ejemplo, con el dinero que se dedica a costear universidad de un estudiante nepalí en Europa, se podría "dar acceso a 229 jóvenes compatriotas suyos a la enseñanza secundaria en Nepal", razonaron.
En este sentido, el informe hace hincapié en la meta de que todos los jóvenes puedan acaban el primer ciclo de enseñanza secundaria, ya que "es allí donde se adquieren las competencias fundamentales para encontrar un empleo apropiado", y para ello destacaron que "tanto los gobiernos como los patrocinadores y el sector privado deben participar en este esfuerzo financiero". EFE