La TV no es boba si “se la provee de contenidos útiles y valiosos”
Cerca de 1.600 hogares han encendido el televisor durante un año y han visto contenidos como ‘Mi voz en el mundo’, en el que menores muestran cómo transcurren sus actividades en la escuela y en el hogar. Niños y jóvenes, entre 6 y 18 años, forman parte del universo de televidentes del programa Educa TV “televisión para aprender”, que estuvo de aniversario hace más de una semana.
El espacio televisivo, cuya coordinadora es la guayaquileña Mónica Maruri, fue pensado para dar clases por televisión pero luego se insertaron episodios de media hora en la programación de los canales de televisión local.
Al inicio del programa Maruri indicó que la idea era tener “una hora diaria de televisión educativa como señala el artículo 69 de la Ley de Radiodifusión y Televisión”.
¿Cómo evalúa este primer año del programa Educa? ¿Se han cumplido las metas?
Casi todas. Hemos hecho programas de televisión en las temáticas más importantes y urgentes. Por ejemplo, el bullying, la interculturalidad e inclusión, el mundo de los adolescentes con sus problemáticas también. Hemos armado un equipo muy bueno, con un modelo que funciona, de productoras delegadas (que hacen seguimiento a las empresas productoras que contratamos), “contenidistas”, pedagogos de diferentes áreas, edición y diseño. Nos hemos mantenido al aire y con encuestas constatamos que el público recibe muy bien nuestra programación. Y finalmente, hemos fortalecido nuestra relación con los canales de televisión que transmiten la hora educativa y con nuestros pares en otros países.
¿Es solo deber del Estado proveer de contenidos audiovisuales educativos en el hogar?
Es un deber del Ministerio de Educación enriquecer y mejorar la calidad de los contenidos de la TV, al igual que fortalecer la experiencia de aprendizaje en el aula. Pero no es deber exclusivo del Estado. Yo siempre me interesé por producir contenidos educativos cuando trabajé en medios.
¿Cómo captar la atención de niños y adolescentes cuando, muchas veces, ellos prefieren los videojuegos o pasar el tiempo detrás de una PC o tablet?
Las encuestas demuestran que los niños siguen viendo televisión. La mayoría de los niños del Ecuador lo hace. Sin embargo, los contenidos online deben aumentar porque la población utilizará cada vez más estos medios.
¿Cómo es la experiencia de hacer un programa educativo en televisión cuando este equipo tiene la fama de ser la caja boba?
Se la ha llamado la caja boba porque las personas se sientan pasivamente frente al televisor y obtienen la información sin cuestionarla. También porque ha reemplazado a la actividad física e interacción en la vida de muchos niños. Pero por sí misma no es boba si se le provee de contenidos útiles y valiosos para la vida de los televidentes de diferentes edades. Y si, además, se educa a la población para que sea crítica y elija lo que ve en televisión.
Uno de los proyectos del canal es Wiñaymanta, ¿qué tipo de documentales mostrarán?
Wiñaymanta es la reedición de documentales sobre pueblos originarios de Ecuador. Está reeditado justamente para públicos jóvenes, con un ritmo más ágil y con trivia. Muestra leyendas filmadas con los habitantes de esos pueblos en su propio hábitat y en su propia lengua.
Educa es parte de un proyecto que incluye también talleres, ¿cuál es la finalidad de esto?
Hemos dictado talleres a docentes para mejorar la calidad de la experiencia educativa y proveer de herramientas a los profesores. Cada capítulo tiene una ficha de orientación metodológica que está colgada en la página web www.educa.ec.