Las enseñanzas de Jorge Mario Bergoglio (papa Francisco) serán iguales a las que pronunció Juan Pablo II hace 30 años en el país pero “expresadas de otra manera y con otro trasfondo social”. Así lo manifestó el expresidente de la Conferencia Episcopal (2007), monseñor Néstor Herrera, quien espera que la visita  despierte el fervor religioso.

“Los mensajes de Juan Pablo II impactaron en los ciudadanos y al menos por 3 años se socializaron de diversas formas. El problema fue que, como en todo somos inconstantes, después de ese fervor inicial vino un decaimiento. Por eso esperamos que la visita del papa Francisco nos motive”, dijo el clérigo.

En el criterio del historiador  Santiago Cabrera, el discurso del exarzobispo de Cracovia estuvo orientado a delimitar el accionar de sus prelados que tenían una interpretación revolucionaria del evangelio, es decir que “vino a poner orden y a insistir en la reconsagración de la sociedad”, dijo el académico.

En esa misma línea un experto consultado por EL TELÉGRAFO -quien prefirió no ser citado- considera que Juan Pablo II vino a proclamar la doctrina social del evangelio, pero no una denuncia o propuesta de fe crítica.
En cuanto a esto monseñor Herrera manifestó que el rol que ejerció el Sumo Pontífice fue de “conciliador” porque tenía que buscar la unidad entre dos tendencias (una conservadora y otra más apegada a los pobres) que fueron fruto del Concilio Vaticano II (1962-1965).

Por lo tanto, al buscar este “balance” el exobispo de Roma se habría enfocado más en la formación de la fe y en su producción: elaboró un catecismo y 14 encíclicas (ver caja de datos), además de retomar el hábito religioso.

En este contexto y con este objetivo Juan Pablo llega a Ecuador el 29 de enero de 1985 durante el régimen del líder socialcristiano León Febres-Cordero a quien en una reunión -según lo recogió la prensa- manifestó que es fundamental considerar la realidad del país para que el evangelio tenga influencia y así lograr cambios. “Los motivos que han determinado mi visita son para conoceros mejor, confirmaros en la fe, alentar y animar desde el evangelio todos los anhelos y aspiraciones orientados a promover una mayor justicia social”, dijo el Santo Padre a su llegada a Ecuador.

Durante 4 días recorrió Quito, Guayaquil, Latacunga y Cuenca, ciudades en las que se reunió con la juventud, los trabajadores y los indígenas. Allí habló de la deuda externa que amenazaba el desarrollo del país; instó a los jóvenes a renunciar a la violencia y a luchar contra el pecado; pidió una justa distribución entre los sectores de la sociedad, y solicitó una objetividad incorruptible a los comunicadores.

‘Papa Superstar’

El pontificado del polaco Karol Wojtyla (Juan Pablo II), quien fue canonizado el año anterior, para muchos fue “excepcional” no solo por ser tercero más largo de la historia, sino por su doctrina y popularidad.

El ‘Papa Superstar’, como se lo llegó a calificar por su carisma, viajó durante 26 años por 129 países. Su viaje número 25 fue a Ecuador cuando ya había escrito 3 encíclicas: Redemptor Hominis (Jesucristo Redentor del hombre); Dives in Misericordia (Dios Padre, Rico de misericordia) y Laborem Exercens (Trabajo humano y problemas sociales), la cual tenía apenas 4 años de existencia.

En esos textos propuso solucionar la crisis de duda y autocrítica al interior de la Iglesia mediante la comprensión y entendimiento de la persona, e insistió en que Jesucristo es el único que puede salvar al hombre y a la sociedad. Sobre el trabajo, durante su visita al país, advirtió que la teoría de la lucha de clases  no era cristiana; pero pidió la participación de los trabajadores en la gestión y beneficios de la empresa. También planteó una justa remuneración por el trabajo, suficiente para mantener dignamente una familia y asegurar su futuro.

A pesar de ser un papado aparentemente exitoso, también existen críticas. Por ejemplo, la revista mexicana Proceso publicó 8 razones por las que Juan Pablo II no podía ser declarado santo: protección a pederastas, ataque a los derechos sexuales, escándalos financieros, apoyo a las dictaduras y ataque a la Teología de la Liberación fueron algunas de las razones.

El teólogo y sacerdote suizo Hans Küng lo ha calificado como el Papa más contradictorio del siglo XX por predicar una política exterior y practicar otra al interior de la Iglesia.

Ahora Jorge Bergoglio (Francisco) es considerado un revolucionario al pedir una Iglesia pobre y pastoral, también ha iniciado una investigación sobre su estructura y pidió que se elabore un sínodo sobre la familia, cuya asamblea será el próximo octubre.

Promovió un importante debate sobre los problemas ambientales en su encíclica Laudato si (Alabado seas) y ha cuestionado el papel de las mujeres en la Iglesia. Expertos consideran que si existe voluntad, el mensaje del papa Francisco podría transformar la Iglesia. (I)

DATOS

Juan Pablo II escribió 14 encíclicas entre 1979 y 2003: 13 son Cartas encíclicas y una -la Slavorum Apostoli- es una Epístola Encíclica. Algunas de ellas son:

En 1979: Redemptor Hominis (Jesucristo Redentor del hombre); 1980: Dives in Misericordia (Dios Padre, Rico de misericordia); 1985: Slavorum Apostoli (Santos Cirilo y Metodio, patronos de los eslavos).

En 1995: Evangelium Vitae (Valor e inviolabilidad de la vida humana); 1998: Fides et Ratio (Sobre la Fe y la Razón); 2003: Ecclesia de Eucharistia (Sobre la Eucaristía en su relación con la Iglesia).

En 2 años de pontificado de Francisco terminó la encíclica Lumen Fidei (La luz de la fe), escrita un 75% por Benedicto XVI y en mayo de 2015 la Laudato si (Alabado seas).

Pontífice oficiará una misa en la Plaza José Martí

El papa Francisco cumplirá una centenaria tradición en su visita a Cuba en septiembre, al llegar hasta la cima de la Loma de la Cruz para bendecir desde allí la ciudad oriental de Holguín. “Llegará hasta la cruz misma y ahí tendrá un pequeño acto de oración y la bendición a la ciudad y la diócesis”, dijo el sacerdote Ángel Andrés González, responsable de comunicación del obispado de Holguín, a 760 km al este de La Habana.

Según el programa oficial del viaje del Papa a Cuba y Estados Unidos, publicado el martes por la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, Francisco estará en la isla del 19 al 22 de septiembre.

En La Habana, el Pontífice oficiará una misa en la Plaza de la Revolución José Martí, visitará al presidente Raúl Castro en el Palacio de la Revolución y sostendrá encuentros con religiosos y jóvenes.

El lunes 21 llegará a Holguín por avión desde La Habana, oficiará una misa en la plaza de la revolución Calixto García y por la tarde irá a la Loma de Cruz, una elevación de 261 metros de altura, en el perímetro norte de esa ciudad de poco más de 290.000 habitantes, la cuarta de Cuba.

En esa elevación, el fraile Francisco Antonio Alegría, prior de la comunidad franciscana en la ciudad, erigió en mayo de 1790 la primera cruz de madera, costumbre española para conjurar enfermedades, desastres naturales y otras desgracias.

La primera cruz estuvo hasta 1950, que se cambió por deterioro. La segunda fue destruida por un rayo en la década del 90, según la creencia popular, “por no estar santificada”. La tercera, hecha de concreto, recibirá la bendición de Francisco durante la visita. (I)