La primera encíclica del pontífice cuestiona el consumismo
Francisco propone 4 cambios ecológicos
A lo largo de la encíclica Laudato si (Alabado seas), cuya versión en español es de 191 páginas, Francisco enumera una serie de consejos ‘ecológicos’ para salvar el planeta y romper con la actual relación entre pobreza y desarrollo, entre tecnología y medio ambiente.
En el texto, por primera vez un Papa se enfrenta a las empresas petroleras, a los mercados financieros y pide a todos los ciudadanos un cambio de estilo de vida. Según Francisco, no se trata solo de mitigar los desastres del cambio climático sino de impedir que “la tierra, nuestra casa, se transforme en un inmenso depósito de inmundicias”. (LEA LA ENCÍCLICA DEL PAPA FRANCISCO)
Reducir CO2 y gases contaminantes
“Se ha vuelto urgente e imperioso el desarrollo de políticas para que en los próximos años la emisión de anhidrido carbónico y de otros gases altamente contaminantes sea reducida drásticamente”, dice el Papa. Insta a utilizar fuentes de energía limpias y renovables. “Todavía no se ha logrado adoptar un modelo circular de producción que asegure recursos para todos y para las generaciones futuras, y que supone limitar al máximo el uso de los recursos no renovables, moderar el consumo, maximizar la eficiencia del aprovechamiento, reutilizar y reciclar”, escribió.
En Ecuador, para 2016 entrarán a funcionar las hidroeléctricas que construye el Gobierno, las que sustituirán a las termoeléctricas que generan energía a partir de la quema de combustible. En base a ello se promueve el uso de cocinas de inducción en vez de las de gas, además de los carros eléctricos.
Agricultura sostenible
El Pontífice reclama a la comunidad internacional “un cambio de rumbo” para “programar una agricultura sostenible y diversificada, desarrollar formas renovables y poco contaminantes de energía, fomentar una mayor eficiencia energética, postular una gestión más adecuada de los recursos forestales y marítimos, asegurar a todos el acceso al agua potable”, recalca.
No a la contaminación acústica y visual
“Muchas ciudades son grandes estructuras ineficientes que gastan energía y agua en exceso. Hay barrios que, aunque hayan sido construidos recientemente, están congestionados y desordenados, sin espacios verdes suficientes. No es propio de habitantes de este planeta vivir cada vez más inundados de cemento, asfalto, vidrio y metales, privados del contacto físico con la naturaleza”, lamenta.
Menos acondicionadores de aire
“Hay más sensibilidad ecológica en las poblaciones, aunque no alcanza para modificar los hábitos dañinos de consumo, que no parecen ceder, sino que se amplían y desarrollan”, advierte el Pontífice, quien pone de ejemplo el uso intensivo de acondicionadores de aire.
“Si alguien observara desde afuera la sociedad planetaria, se asombraría ante semejante comportamiento que a veces parece suicida”, comenta.
¿Qué dice la Iglesia ecuatoriana?
Sobre el documento, el vocero de la Arquidiócesis de Guayaquil, César Piechestein, señaló que es necesario comprender bien el mensaje de esta primera encíclica de Francisco. El sacerdote destaca que no solamente se habla de la importancia de la ecología como conservación, sino de la ecología humana, esto es, sobre cómo vivir como familia, aprender a usar los recursos que la naturaleza brinda a los hogares.
“El Papa incluso nos ha hablado acerca de respetar la vida, donde todos los seres son creados por Dios, pero también la vida debe ser protegida desde la concepción, esto también lo comunica el Santo Padre”, manifestó.
En ese contexto, Piechestein recalcó que en este momento es importante que los ecuatorianos comprendan estos temas, ya que probablemente el Sumo Pontífice hablará de esto en las misas campales que ofrezca en el país.
Piechestein encabezó ayer un conversatorio en la Universidad Católica de Guayaquil sobre la importancia de la venida de Francisco. Sobre la encíclica Alabado Seas, la mayoría de los estudiantes presentes desconocía el contenido del documento, publicado ayer y que ha generado un debate en el mundo.
Bruno Erazo Mera, estudiante de la Facultad Técnica para el Desarrollo, se refirió al tema como un consejo a las personas acerca de lo que está pasando en el mundo. “El Papa está mostrando las injusticias de las grandes empresas que tienen mucha riqueza en países en desarrollo, donde explotan sus recursos naturales pero dejan destruido el medio ambiente y a las comunas, de ahí viene el desastre ecológico”, sostuvo.
También mencionó que el Pontífice advierte sobre la desigualdad entre las personas “que abusan de los demás y que deberían ayudar a que la gente salga de la pobreza dando trabajo y combatiendo la corrupción”. (I)
DATOS
En su encíclica, el Papa reconoce el cambio climático, una realidad que aún es debatida por sectores conservadores de Estados Unidos.
“Muchos de aquellos con más recursos y poder económico o político parecen concentrarse en ocultar los síntomas, tratando solo de reducir algunos impactos negativos del cambio climático”, afirma.
No todos los líderes o políticos del mundo han recibido con agrado la primera encíclica de Francisco. Por ejemplo, el candidato presidencial Jeb Bush se pronunció en
contra del texto.
El republicano indico que el Papa no le “iba a dictar su política y lo que debía hacer era dedicarse a hacer mejores a las personas y olvidarse de temas políticos”. Bush ha dicho antes que no hay evidencias ‘concretas’ de que los seres humanos son causantes del cambio climático.
En Paraguay esperan 3 millones de fieles
Paraguay se prepara para recibir a unos 3 millones de visitantes entre el 10 y el 12 de julio por la visita del Papa Francisco, que realizará en Asunción la última escala de su gira sudamericana previo paso por Ecuador y Bolivia.
“Habrá un flujo de ingreso histórico, sin precedentes en Paraguay”, afirmó el director general de Migraciones, Jorge Kronawater. En previsión, las autoridades desplegaron un sistema extraordinario para el registro de extranjeros.
“Se estima que la mitad de esa cantidad vendrá procedente de Brasil y especialmente de Argentina”, dijo el arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela.
En sus homilías, Valenzuela reclama “hospitalidad” a los paraguayos para acoger a la multitud que participará de las misas papales programadas para el sábado 11 y domingo 12 de julio.
La Iglesia católica paraguaya promueve alojamiento gratuito para los extranjeros que lo soliciten y para ello lanzó un sitio en internet (franciscoenparaguay.org).
La efervescencia ante la llegada del Papa ha movilizado a miles de católicos argentinos, a quienes se suman miles de paraguayos que viven en las villas miseria de la capital argentina, por donde acostumbraba a ‘pastorear’ el ahora líder de la Iglesia católica.
Las alcaldías paraguayas establecieron lugares especiales para el estacionamiento de entre 3.500 y 5.000 buses que se espera ingresen desde países vecinos. Francisco protagonizará tres reuniones con feligreses. (I)