La práctica de la circuncisión en niños continúa siendo un tema cuestionado en algunos países. Mientras que en  Estados Unidos a ocho de cada diez niños se les realiza esta operación, hay activistas anticircuncisión que la  consideran como una “mutilación genital”.

En  Alemania el tema ha ido más lejos, pues pese a que un sondeo revela que el 56% de los alemanes lo aprueba y el 35% se opone, una Corte de Justicia lo ha  declarado como un “crimen”.  

Hace poco el tribunal de gran instancia de Colonia (oeste) publicó una decisión que considera que la ablación del prepucio por motivo religioso es una herida intencional y es, por lo tanto, ilegal.

“El derecho de un niño a su integridad física prima sobre el derecho de los padres”, afirma en resumen del veredicto.
Esta decisión ha generado el debate por parte de judíos y musulmanes, que son quienes por siglos realizan la circuncisión como parte de una tradición. 

El director del Consejo Central de Judíos en Alemania, Dieter Graumann, afirmó a la revista Focus que “la circuncisión es absolutamente fundamental para la fe judía y no negociable. En todos los países del mundo se respeta este derecho religioso”.

Y Ecuador forma parte de ese grupo. El doctor Luis Caicedo Urresta, pediatra neonatólogo, explica que existen varias indicaciones para realizar la circuncisión: “se debe hacer cuando presentan prepucio largo abundante, que es lo que cubre al glande o cuando tienen fimosis (un estrechamiento a nivel del prepucio). La otra indicación es la religiosa, los judíos lo realizan a todos los hijos cuando nacen con  o sin necesidad”.

Asegura que en Ecuador se respeta el criterio de los padres. “Usualmente cuando uno de los hijos de la familia ha sido circuncidado generalmente por política hacen lo mismo con el resto”.

El doctor Leonardo Proaño, quien es cirujano pediatra, cuenta que en el país él ha realizado cerca de 20  circuncisiones a niños musulmanes por pedido de sus padres.

Indica que aunque se les advierte que se debe hacer por una razón médica la decisión de ellos es la que al final  prevalece.

Según el galeno el costo de esta intervención está entre 600 y 1.200 dólares, dependiendo del hospital o la clínica a la que se acuda.

Asimismo, Proaño explica que existen dos tipos de circuncisión, pero que solo una es recomendable hacer.  Por un lado está la de rutina “que es cuando los niños nacen o tienen un año de vida y se les coloca una campanita, una prensa metálica para cortales el prepucio.

Y la otra se realiza a los cuatro años cuando al niño se le baja el prepucio (la porción de piel que cubre el cuerpo peneano y el glande) a muy temprana edad o se le ha cerrado, entonces para prevenir infecciones que pueden repercutir en las vías urinarias o en problemas renales se lo hace por higiene. De las dos solo la segunda es la conveniente”.

Agrega que en el país dos de cada diez niños se realizan la circuncisión, a diferencia de  EE.UU., donde es a la inversa. En Ecuador la circuncisión sigue  siendo una práctica poco recurrente.