Hace dos años, los ecuatorianos aprobaron la pregunta 10 de la consulta  y referéndum realizados el 7 de mayo de 2011, cuya propuesta era: “con la finalidad de evitar la explotación laboral, ¿está usted de acuerdo con que la no afiliación al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social de trabajadores en relación de dependencia sea considerada delito?”.

“Antes no pagaban el sueldo básico, no nos aseguraban, trabajábamos más de 8 horas y no nos reconocían horas extras. Había mucho abuso laboral e incluso físico o verbal por parte de los patrones”, comentó Mariuxi Cedillo, empleada doméstica asegurada.

Cedillo indicó que con la consulta popular logró cobrar un sueldo básico y que se le reconocieran sus beneficios de ley. “Igual, no se está cumpliendo en todos los casos porque aún hay despidos intempestivos, y lo que se quiere es que todas quienes trabajan en el servicio doméstico estén acogidas al Convenio 189 (C189) para así mejorar su calidad de vida”, dijo.

El C189, conocido como Convenio sobre las trabajadoras y los trabajadores domésticos, fue adoptado durante la Convención Internacional del Trabajo, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 16 de junio de 2011.

Este tratado ofrece protección específica a las trabajadoras y los trabajadores domésticos, donde se establecen sus derechos y principios básicos, y se exige a los Estados que firmaron el documento tomar una serie de medidas para lograr que el trabajo decente sea una realidad para los trabajadores remunerados del hogar.

En base a esto, la Asociación de Trabajadoras Remuneradas del Hogar (TRH) lanzó  la Campaña de Sensibilización Ciudadana “Yo apoyo la ratificación del C189 de la OIT y, ¿tú?”.

Esta agrupación, que reúne a aproximadamente 250 mujeres afiliadas al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), pidió por medio de la campaña la ratificación del C189 y la reforma inmediata del Código Laboral ecuatoriano.

“Esta es la segunda campaña que realizamos. En noviembre pasado hicimos una campaña sobre qué es el Convenio 189, pero este año se busca la ratificación”, señaló Jackeline Patrón, presidenta de la Asociación TRH.

Patrón acotó que para lograr el objetivo de su campaña han buscado apoyo de algunos asambleístas electos para que su solicitud pueda llegar a la Asamblea Nacional,

Pero también hay empleadas domésticas que por su propia voluntad prefieren no asegurarse, como es el caso de Juana Navarrete, de 38 años.

“Mis patrones sí me han propuesto  afiliarme al IESS, pero no quiero porque recibo el bono, y si me aseguran me han contado que luego me lo quitan”, comentó Navarrete refiriéndose al Bono de Desarrollo Humano que le otorga mensualmente el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), aunque esta institución aseguró anteriormente que esto no ocurriría.  

La presidenta de la Asociación TRH indicó que como organización realizan campañas de sensibilización respecto a los despidos intempestivos con el Ministerio de Relaciones Laborales (MRL).

“Hemos hablado con varios funcionarios de esa institución, pero algunos no nos toman en cuenta porque somos asociación y no sindicato. Que no tenemos fuerza, dicen, y nos mandan de un lado al otro, pero nunca hemos tenido un acercamiento apropiado con ellos”, expresó Patrón.

De acuerdo con información oficial de esta cartera de Estado, aún se mantiene el programa de Difusión de Derechos y Obligaciones Laborales: Trabajo Digno en el Ecuador, en el cual también se incluye a las trabajadoras remuneradas del hogar.
El objetivo es dar a conocer a los trabajadores en relación de dependencia  sus derechos y obligaciones laborales, así como concienciar a trabajadores y empleadores sobre los mismos.     

El programa, que se inició en 2011 y durará hasta este año, está dirigido a todos quienes se encuentren laborando, y a sus patrones. Este proyecto en la actualidad cubre a las 24 provincias del país. Además, funcionarios del MRL realizan inspecciones integrales, es decir, visitan a las empresas, negocios, u hogares.