El promedio en comprensión lectora fue de 405 sobre 800
Dieciséis estudiantes de las universidades catalogadas en la categoría “E” se hicieron acreedores a una beca, tras obtener las mejores calificaciones en los exámenes que rindieron el pasado 4 de marzo.
8.836 estudiantes que se han formado en dieciséis centros de educación superior participaron en la prueba, explicó Guillaume Long, director ejecutivo del Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (Ceaaces).
Los jóvenes recibieron un diploma y una beca de $ 200.000 para que estudien en el extranjero. El incentivo económico incluye el traslado al país elegido para cursar la carrera, la manutención durante su estancia y los costos que necesite para realizar los trabajos de investigación en el período.
Hugo Rodríguez, subsecretario de Ciencia y Tecnología del Ceaaces, informó que se han invertido 180 millones de dólares del Programa Nacional de Becas para costear las subvenciones. “La educación es la mejor inversión que se puede hacer en el país”, aseguró.
Las pruebas eran de conocimientos generales y otros específicos que han obtenido durante la carrera y tenían un puntaje máximo de 800.
El Ceaaces también otorgará un certificado a 139 alumnos que obtuvieron calificaciones superiores a 650 puntos. De las 16 universidades evaluadas, la mitad registró las mejores calificaciones.
Son la Universidad Cristiana Latinoamericana, del Pacífico, Tecnológica San Antonio de Machala, Autónoma de Quito, Metropolitana, Panamericana de Cuenca, Tecnológica Indoamérica y la de Otavalo.
En la última, el estudiante Ricardo Germán Haro Tinajero, egresado de la carrera de Ingeniería en Desarrollo Social y Cultural, obtuvo la nota más alta: 800/800.
Él no estuvo presente en la premiación, porque se hallaba en Perú en el Encuentro de Jóvenes por la Cultura, realizado en el Cuzco.
Germán Haro, padre del universitario, asistió para representarlo. “Es un gusto saber que mi hijo salió adelante. Él siempre se ha preocupado por estudiar y ahora tiene una recompensa”, dijo.
Actualmente, el joven hace su tesis sobre los problemas de nutrición en las zonas rurales de Otavalo. Tras la entrega de diplomas, Long manifestó su preocupación por los estudiantes que han obtenido bajas calificaciones.
Aseguró que las pruebas no fueron difíciles, ya que abordaron temas de un banco de preguntas de 16 carreras. Sin embargo, los resultados no fueron satisfactorios. Por ejemplo, los alumnos de Ciencias Agrícolas tuvieron un promedio de 568, Enfermería 526, Mercadotecnia 480 y Psicología 481, sobre 800.
Los resultados de las Pruebas por Competencia, alcanzaron en promedio la mitad de la máxima nota. En Comprensión de Lectura, el promedio fue de 405,81, mientras que en de Expresión, 399,72. “Un estudiante sin importar la carrera, debe ser buen lector y entender lo que lee. No podemos permitir que haya universitarios que no sepan leer”, manifestó Long.
El funcionario consideró que el problema se debe a que los centros de educación superior no cuentan con bibliotecas bien implementadas, y a eso se suma que no se invierte en temas de investigación.
El próximo 12 de abril se conocerá el informe de la auditoría realizada a las 16 universidades, en el que se conocerá cuáles son los centros que cerrarán.