Desde que asumió el Pontificado en marzo de 2013, el argentino Jorge Mario Bergoglio ha protagonizado cambios al interior de la Iglesia Católica. Con un estilo directo y diferente, Francisco ha estado presente en otras confesiones dentro del cristianismo. Por ejemplo, cuando fue nombrado Papa en la ceremonia estuvo presente el patriarca de Constantinopla, Bartolomé I, algo que jamás había ocurrido desde el Cisma de Oriente en 1504.

Dos meses después, como rememora el portal Orden Mundial, el patriarca de Alejandría Teodoro II visitó el Vaticano en una clara muestra de acercamiento entre los católicos ortodoxos y los romanos.

Esta vez, precisamente en octubre de 2016, Francisco viajará a Lund (Suecia) para participar en una ceremonia ecuménica por los 500 años de la reforma protestante de Martín Lutero, según informó la agencia oficial del Vaticano. La Reforma Luterana fue iniciada en 1517 en Alemania por Lutero, quien redactó 95 tesis criticando a la Iglesia Católica por el cobro de las indulgencias.

Por su parte, en un comunicado conjunto, el Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos (PCPUC) y la Federación Luterana Mundial (LFW), señalaron que el evento destacará “los sólidos progresos ecuménicos entre católicos y luteranos y los dones conjuntos recibidos a través del diálogo”.

La apertura mostrada por Francisco se evidencia en los resultados de la encuesta del Centro Pew Research titulada: “La Religión en 43 países del mundo”. En el estudio, el 60% de católicos encuestados indicó que tiene una imagen favorable del papa argentino. El 28% dijo que tenía una imagen negativa de él.

En América Latina, la cifra de aprobación a las palabras y actos del Pontífice son aún más altas: 72% indicó que lo consideraba un papa amigable. Antes de embarcarse en su viaje a Suecia, Francisco irá a México, considerado un país altamente católico. Todo comenzará el 12 de febrero y terminará 6 días después. (I)