Seis personas fueron retiradas por la Policía de un terreno baldío donde consumían alcohol, en Calderón, al norte de Quito. Todos compartían en un solo vaso. Poco después regresaron al lugar y allí permanecieron otras dos horas más. 

Durante un control de la Policía Metropolitana en el Centro de Abastos Mayorista, en el sur de Quito, se registraron agresiones a los agentes y hubo 16 fiestas en varias zonas de Quito.

En el sector del Suburbio de Guayaquil un local de cevichería ofreció atención al cliente, como siempre, y una clínica veterinaria también abrió sus puertas.

La Policía Nacional reportó que 250 personas violaron el toque de queda, siendo Guayas la provincia con mayor número de infractores.

Alexandra Ocles, secretaria de Gestión de Riesgos y Emergencias, expuso que en las calles aún se evidencia a personas realizando actividades. “El comportamiento de la ciudadanía es complejo y eso dificulta la posibilidad de reacción y la capacidad de respuesta desde las instituciones”, reveló.

La Secretaria de Estado precisó que las cifras demuestran que el proceso de contagio crece y que existe un incremento de entre el  10% y 20% por día. “Lo único que nos hace bien en este momento es quedarnos en casa”, aseveró.

Pero ¿a qué responde la desobediencia de la ciudadanía? La psicóloga e investigadora del área de Salud de la Universidad Andina, Milena Yépez, explica que en el país se repite la creencia, como en Europa, de que no es algo tan grave o no afecta a toda la población sino a las personas de la tercera edad.

“Muchos piensan que es posible seguir en sus actividades cotidianas, pero precisamente en Guayaquil, ciudad donde se registra la mayoría de casos, los ciudadanos siguieron sin tomar las medidas necesarias, lo que ha forzado a tomar decisiones más estrictas como el toque de queda más extendido”. La psicóloga enfatiza que la ciudadanía debe  quedarse en casa, con la familia.

Opina que  la sociedad de consumo ha empujado a las personas a vivir fuera y a no compartir. “Esto nos ha hecho replantear la convivencia, el cuidado, la salud, la vida diaria”, anotó.

El epidemiólogo Marcelo Aguilar señaló que este comportamiento provocará que se produzcan contagios masivos, que puedan superar la prestación del servicio de salud del país.

“Conocemos que el 80% de casos son leves, el 15% son  moderados y el 5% graves (…) Sugiero que el Gobierno debe generar un toque de queda generalizado en Guayaquil, pues es la provincia con más casos y en la que menos se acatan las disposiciones”.

  El especialista puntualiza que  “no existe ninguna indicación que sugiera que el clima modifique la transmisión, es un virus que no conocemos y debemos guardar una distancia de hasta dos metros”. (I)

Un gesto altruista por estos días puede ser salvar vidas con la donación de sangre.

Cadetes donan sangre para suplir el desabastecimiento
740 cadetes de la Escuela Superior de la Policía Alberto Enríquez Gallo donaron sangre a la Cruz Roja de Ecuador, ante el  desabastecimiento por la emergencia sanitaria.

La Cruz Roja informó que también el jueves, con el apoyo de Bomberos de Quito, se realizó el primer envío de sangre y hemocomponentes desde Quito hacia Latacunga para abastecer a las provincias de Sierra centro. Asimismo, a su regreso se traerá pintas de sangre para procesar en el Hemocentro de Quito.

Las personas que tengan la predisposición de sumarse a este gesto pueden comunicarse con  la Cruz Roja, ya que, en este  caso, su personal visitará el domicilio para efectuar la recolección.

La Cruz Roja informó que trabajará en estas circunstancias de emergencia sanitaria. (I)