“El bono es algo transitorio, es una palanca para crear oportunidades y capacidades”, señaló Doris Soliz, ministra de Inclusión Económica y Social (MIES), durante la presentación del informe de rendición de cuentas de 2013.

Durante ese periodo, esta cartera de Estado registró a un total de 1’717.491 personas habilitadas para la entrega del Bono de Desarrollo Humano (BDH). El 78% de ellas fueron mujeres y el 22% hombres.

Según el informe de gestión de la ministra Soliz, alrededor de 100 mil hogares dejaron de recibir este bono en 2013 y una de las razones fue el emprendimiento productivo, en el que destaca el crédito de desarrollo humano otorgado a los beneficiarios del bono para que emprendan sus propios negocios.

Por ejemplo, entre enero y noviembre del año pasado se entregaron créditos a 187.467 beneficiarios con una inversión que superó los $ 117 millones. El objetivo para este año es lograr que el 40% de usuarios incrementen sus ingresos en un 20%.

Soliz también se refirió a otros logros, frente a un auditorio integrado por más de 100 personas, entre las que estaban madres de familia, educadoras, personas de la tercera edad. Destacó la profesionalización de 2.268 parvularias y 3.300 educadoras, algunas de las cuales trabajan en los Centros Infantiles del Buen Vivir (CIBV).

Además destacó la fusión del ex- Instituto Nacional del Niño y la Familia (INNFA) y el Programa de Protección Social al MIES. “La atención a los niños y personas que lo requieren no puede ser obra de la buena voluntad de una primera dama, tiene que ser un derecho para todos”, aseguró.

Rosa González acudió como representante de las personas con discapacidad que actualmente asisten a centros de atención. “El trabajo que se ha hecho ha sido gratificante, ya que poco a poco nuestros hijos han desarrollado sus habilidades y destrezas y así son más independientes en su vida cotidiana”, comentó esta madre de familia.

El MIES ha invertido $ 70 mil para ejecutar 10 eventos de esparcimiento y discusión de políticas para personas con discapacidad. Además capacitó a 658 funcionarios públicos con herramientas básicas para atender a la población con discapacidad auditiva en Azuay, Pichincha, Los Ríos, etc.

Por otro lado, Álvaro Sáenz, secretario ejecutivo del Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia, destacó el avance en la agenda intergeneracional. Es una propuesta que crea redes entre las diversas generaciones para evitar relaciones de dominación y que genera prácticas solidarias y de enseñanza mutua en espacios culturales de uso comunitario.