El vicerrector académico de la Universidad de Guayaquil, José Apolo, se hizo cargo nuevamente del rectorado. La razón: 2 meses de vacaciones solicitadas por Carlos Cedeño debido a motivos personales.

En esta ocasión la asunción del rectorado estuvo marcada por el respaldo de estudiantes de la Facultad de Medicina, que gritaban “Apolo amigo la U está contigo” y una comitiva de decanos de varias facultades.

Durante los 2 meses en el cargo, Apolo se comprometió a solucionar el caso de los profesores jubilados; disponer la apertura de expedientes administrativos para conocer a los responsables de violar la  gratuidad  y agilizar el proceso de devolución de dinero que espera concluya hasta finales de año. Otro tema que tratará, dijo, son las becas a docentes para realizar su doctorado y maestría.

“Hay que asignar el dinero. He visto a maestros desesperados que deben viajar a otros países y aún no tienen los pasajes, ni el financiamiento. Todo eso se va a determinar. Habrá agilidad a nivel administrativo”, dijo.

La entrega de los estatutos en 2 semanas y el cumplimiento de las elecciones serían el próximo mes de julio -pospuestas a inicios de mayo por la Comisión Interventora- fueron otras de las promesas de Apolo.

“Tengo un compromiso con la comunidad universitaria que máximo en 2 semanas debemos tener listos y aprobados los estatutos por el Consejo Universitario, por lo que no habrá impedimento de que se convoquen elecciones democráticas. La comunidad universitaria es la que designará quién ocupará el rectorado”.

Jorge Kalil, presidente de la Comisión Interventora, mencionó que los estatutos de la universidad “tendrán que pasar la aprobación interna y externa”. Kalil confía en que con Apolo, la comisión “pueda funcionar mejor porque antes hubo un boicot, ahora esperamos que las cosas cambien”.