El presidente Rafael Correa anunció en septiembre del año pasado la posibilidad de que las amas de casa se beneficien del seguro social.

El aporte de su trabajo a la sociedad es del 15% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que significa más de $10 mil millones. Solo por comparar, el petróleo aporta el 9% del PIB.

Esta propuesta está contemplada en el proyecto de Código Orgánico de Relaciones Laborales que, hasta ahora, ha discutido la Asamblea Nacional en primer debate. Se espera que para este 2015 el documento sea aprobado.

En Ecuador, 2’403.521 mujeres son amas de casa, según el INEC. Actualmente también hay quienes se afilian de forma voluntaria y por extensión de cobertura. Son, por lo general, personas que laboran de forma independiente o amas de casa.

Aunque el índice de quienes trabajan exclusivamente en el hogar se redujo del 80% al 30%, las mujeres aún dedican 31 horas y 49 minutos al trabajo no remunerado en el hogar. Los hombres solo trabajan 9 horas.

El presidente Correa dijo en 2014 que el Estado garantizaría el derecho mediante un subsidio de hasta el 90% a la afiliación. Ese beneficio se otorgaría en función de la situación socioeconómica de cada familia (calculada en base al número de personas que trabajan). Los familiares completarían el restante 10%.   

Víctor Hugo Villacrés, titular del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en diálogo pasado con EL TELÉGRAFO explicó que los beneficios que ofrecería el IESS serían jubilación por invalidez, vejez y muerte. “Es una pensión jubilar que garantizará que estas personas no  estén en el círculo de la pobreza al momento en que su vida activa vaya disminuyendo”, aseveró.

Según la Cuenta Satélite de Trabajo no Remunerado en los Hogares (2007-2010), difundida el año pasado por el INEC, las mujeres aportan más que ellos en tareas domésticas.

Cuando se trata de cocinar, el 53,99% de mujeres realizan esta actividad, solo el 6,21% de ellos lo hace. El 11,69% de ellas lavan la vajilla en comparación con el 1,88% de hombres.

En actividades de cuidado también se repite esta tendencia. El 32,90% de mujeres cuidan a un enfermo en casa, frente al 17,29% de hombres.

Solo superan a las mujeres cuando se trata de realizar servicios de reparación en los hogares. Un 88,7% de hombres lo hace, frente a un 82,23% de mujeres.