El terremoto del 16 de abril pasado no fue la única tragedia que puso a prueba la capacidad de reacción del Cuerpo de Bomberos de Pedernales, en Manabí. Esta localidad fue una de las más afectadas por el movimiento telúrico de 7,8 grados.

A pesar de ello y de contar con pocos agentes y logística cumplió tarea de apoyo en otras zonas impactadas por el sismo y por otros eventos. Eso se evidenció el pasado 2 de mayo.  Un incendio en el barrio Divino Niño afectó 2 viviendas de construcción mixta (tabla, caña, madera y cemento).

Para sofocar las llamas, un contingente de solo 9 bomberos contó con el apoyo de varios tanqueros de agua que se encontraban en los alrededores; también asistieron miembros de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) e incluso de la Policía Nacional.

Aunque no se registraron heridos, la tragedia según indican los bomberos fue suficiente para demostrar que existe falta de recursos y de personal para brindar una mejor cobertura. Así lo aseguró Reinaldo Canchingre Arteaga, jefe del Cuerpo de Bomberos de la localidad.

El titular del organismo recordó que -ahora más que nunca- se necesita mantener  equipado al personal, puesto que luego del terremoto muchas instalaciones eléctricas o de gas pueden quedar afectadas y causar un eventual flagelo.

Canchingre reconoció que es muy complicada la labor con recursos limitados.

Los exteriores del Cuerpo de Bomberos de Pedernales funcionan como albergue. Ahí se acogió a 2 familias, pero su infraestructura carece de implementos para atenderlos de mejor forma. Foto: Marco Salgado / El Telégrafo

El Cuerpo de Bomberos de Pedernales está integrado por 15 personas: 4 administrativos y 11 operativos, que tienen que alcanzarse, en una población de 4.876 habitantes. La logística también es insuficiente.

En la actualidad hay 2 vehículos, uno de ellos se encuentra fuera de servicio por daños mecánicos y en la bomba. Se trata de un carro Mercedes Benz de 1999. “Este vehículo trabajó más de lo que se esperaba”, explicó.  

La infraestructura tampoco se encuentra en condiciones óptimas para funcionar en toda su capacidad. La entidad se encuentra ubicada en la avenida García Moreno y calle Ambato, a pocos metros de una gasolinera. Las actuales dependencias no cuentan con áreas administrativas, operativas, ni tampoco con sala de sesiones.

El garaje es una instalación improvisada. El techo de tejas para proteger los vehículos se levantó con autogestión. Tuvo una inversión de $ 2.000. Canchingre explicó que se presentó el proyecto a la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades), y que espera por su aprobación.

El capitán Emilio Cortés, voluntario desde hace 17 años, aseguró que operan con una camioneta pequeña de ataque rápido, adquirida en 2014. Además tienen una camioneta, donada por la ciudadanía con la cual se cumplen las acciones de rescate.  

Esta realidad no solo la atraviesan los agentes de Pedernales, también la viven los otros 51 departamentos de Bomberos de la provincia, según indicó el teniente coronel Juan Velázquez, jefe del Cuerpo de Tosagua y presidente de la Asociación de Bomberos de Manabí.

Indicó que el Cuerpo de Bomberos de la provincia necesita una motobomba en cada una de estas localidades, también se requiere de ambulancias para ofrecer asistencia de primera mano a los heridos.

Velázquez manifestó que se ha realizado un estudio técnico para determinar cuál es el valor que se requiere para equipar a los casacas rojas. Estimó que son necesarios al menos $ 20 millones.

Ante esta situación, el representante de los Bomberos opinó que el Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) debe sensibilizarse con las zonas más afectadas por el terremoto, especialmente con Jama, Pedernales, Manta, Tosagua y Calceta. “No recibimos ni un solo centavo del gobierno seccional”, expresó. (I)

El vehículo que funcionaba como motobomba en Pedernales se encuentra en condiciones deficientes. El jefe de Bomberos de este cantón indicó que la vida útil del automotor ya culminó. Foto: Marco Salgado / El Telégrafo