Las relaciones EE.UU.-Cuba se restablecen luego de 88 años
Barack Obama se convirtió en el primer presidente estadounidense en funciones en pisar suelo cubano en 88 años. En abril de 2009, a 2 meses de su posesión, da el primer indicio de su deseo de mejorar las relaciones diplomáticas con Cuba al levantar las restricciones a los viajes de los cubanoamericanos y los envíos de remesas a la isla.
El proceso de restablecimiento de las relaciones bilaterales alcanza su punto álgido el 17 de diciembre de 2014, cuando Raúl Castro, presidente de Cuba, y Obama anuncian la intención de dialogar.
El 2015 fue el año en que se efectuaron las rondas de conversaciones para efectivizar el proceso de normalización y, en febrero de 2016, en la sede del Hotel Nacional de Cuba, se firmó el Memorando de Entendimiento para el establecimiento de los vuelos regulares entre Cuba y Estados Unidos.
La intención de Obama de visitar la isla se hizo realidad el 20 de febrero de 2016, cuando la Casa Blanca informó que el presidente estadounidense visitaría Cuba el 21 y 22 de marzo de ese año.
Obama calificó de histórica su visita y destacó que lo que deseaba era que los niños vieran como algo normal que un presidente de EE.UU., llegue a su país.
¿Qué se obtuvo de este proceso? Se duplicaron las remesas, hubo más acceso a la comunicación por internet, más salida de cubanos hacia EE.UU. y viceversa. Incluso La Habana, fue el escenario donde directores de Hollywood decidieron rodar escenas de varias películas.
Sin embargo, una de las promesas incumplidas de Obama fue la de cerrar la cárcel ubicada en la bahía de Guantánamo.
Justamente, en febrero del año pasado, él presentó al Congreso el plan de cierre de esta prisión, una iniciativa que hace 12 años contaba con la aceptación de republicanos y demócratas, tal como lo manifestó en su momento el senador John McCain.
Durante el mandato de Obama, 147 presos fueron transferidos a Oriente Próximo, África y la península Arábiga. En su intervención en el Congreso, explicó que los costos por mantener abierta esa prisión eran elevados y citó que en 2015, la inversión fue de $ 450 millones, en una cárcel donde hay menos de cien detenidos.
“Durante muchos años ha sido claro que la prisión de Guantánamo no colabora con nuestra seguridad nacional sino que la socava [...] La primera vez que me postulé a la presidencia reconocí que la instalación debía ser cerrada”.
Pero el que se opuso en su mandato a esta propuesta fue precisamente el Congreso, ya que, especialmente los republicanos rechazaron el traslado de los presos de Guantánamo a cárceles de los Estados Unidos.
Guantánamo albergó hasta 800 reclusos luego de su apertura, ordenada por George W. Bush, tras los ataques del 11-S, en 2001, a EE.UU. (I)