Hospitales y morgues colapsadas en Hong Kong
Hong Kong, con 7.3 millones de habitantes, actualmente atraviesa la quinta ola de contagios por covid-19 y la peor que han vivido hasta el momento.
Luego de mantener al covid-19 controlado durante casi dos años, las autoridades de Hong Kong confesaron los problemas suscitados en estos meses por la propagación de la variante Ómicron.
El aumento de contagios atribuidos a Ómicron provocó que los cuerpos de las personas que murieron a causa de esta enfermedad sean almacenados en contenedores refrigerados, debido a la falta de espacio en las morgues. Un representante de la industria funeraria mencionó para medios locales que el aumento de muertes ha provocado que se agote la disponibilidad de ataúdes.
Carrie Lam, jefa del gobierno local, reconoció la situación en conferencia de prensa y dijo que estarían próximos a llegar dos embarques de ataúdes procedentes de China continental.
“Me enteré por la Oficina de Alimentos y Salud que están tratando de organizar el transporte de ataúdes por agua… Intentaremos encontrar la manera de que la familia se lleve el cuerpo de vuelta para que puedan organizar el funeral pronto. Los crematorios también han estado trabajando día y noche a plena capacidad”, dijo Lam.
En menos de tres meses Hong Kong ha registrado casi un millón de infecciones y más de 4.600 muertes. El sistema de salud está desbordado por las muertes, especialmente de la población de edad avanzada, que corresponden a quienes se negaron a vacunarse.