Una comisión de vigilancia a los trabajos para la implementación del tranvía se conformó ayer.

El buró está integrado por miembros de la Universidad de Cuenca, de la Cámara de Comercio y un representante ciudadano. Este último aún no se conoce cómo será designado.

Fabián Carrasco, titular del centro de educación superior, aclaró que la comisión no está vinculada directamente con el Cabildo ni con los constructores del nuevo sistema de transporte para la capital azuaya.

“Tendremos un acercamiento con la ciudadanía para saber qué piensan de las obras en ejecución para transmitir esas inquietudes a la empresa constructora, a los responsables de la fiscalización y al Municipio.

El presidente del gremio de comerciantes de Cuenca, Antonio Vázquez, expresó que su presencia es para observar  las obras complementarias como los pasos para los transeúntes. “Estos deben dar seguridad para los ciudadanos. Estamos aquí para velar por los intereses de nuestra ciudadanía y que los proyectos se hagan bien”, enfatizó.

El alcalde, Marcelo Cabrera, manifestó que las obras avanzan de acuerdo a lo planificado.

Incluso, dijo, se está poniendo mayor énfasis en sectores como la calle Gran Colombia, donde se debe entregar las estructuras necesarias lo más pronto posible.

En cuanto a la falta de recursos ($17 millones) para las obras complementarias manifestó que se buscará el apoyo necesario para acceder a los fondos. “La ciudadanía debe saber que una construcción como esta trae una serie de modificaciones. ¿O nos estancamos o seguimos avanzando?”, señaló.

En tanto, para la penúltima semana de este mes se prevé el arribo de la primera unidad del tranvía. La máquina está viajando, vía marítima, desde hace varias semanas desde Europa.         

El costo total del proyecto supera los $220 millones. (I)