La vía unirá las provincias de Azuay y Morona Santiago, en el sur del Ecuador
Un sueño de 77 años empieza a tomar forma
Chigüinda.-
Flor Brito, teniente Político de Chigüinda, resalta la ejecución de la vía Sígsig-Chigüinda-Gualaquiza, como la más emblemática del sur de la Amazonía, toda vez que con estos 90 kilómetros de asfaltado se unirán Azuay y Morona Santiago entre los cantones Sígsig y Gualaquiza.
Dentro de estos cantones se encuentran muchas poblaciones como la propia Chigüinda, Bermejos, Rosario e Ideal, todas ellas de gran población que serán beneficiadas por la vía, ya que por considerarse una zona productiva especialmente ganadera, podrán acceder a los mercados de Cuenca y otras ciudades con mejores condiciones de transporte.
Sinohydro, la empresa constructora, se encuentra en la actualidad trabajando en varios frentes, con el ensanchamiento en todos sus tramos. En Morona Santiago, el segmento de mayor longitud en que tiene influencia la obra, se trabaja en 3 frentes, lo que motiva a los habitantes, conductores y pasajeros a colaborar con los cronogramas establecidos por la empresa constructora, sin que se cause molestias en el tráfico vehicular ni en los trabajos que se ejecutan.
Circulante y fuentes de trabajo
La ubicación de un campamento en Chigüinda, manifiesta Ángel Cobos, comerciante de la localidad, ha sido beneficioso porque ha mejorado notablemente la economía de las familias por la demanda de los productos ya sean estos de ferretería, insumos agropecuarios o productos de consumo básico; consiente de que se debe a las fuentes de trabajo que Sinohydro ha dado prioridad a las y los habitantes de la zona en forma general, como proveedores, obreros y otros servicios que requiere la constructora.
Cronología de una obra de interés nacional
Samuel Arévalo Cabrera, ex Teniente Político de la parroquia Chigüinda, recuerda que en el mes de junio de 1938, la obra se inició desde el cantón Sígsig. Luego de firmarse el Protocolo de Río de Janeiro, en 1942, esta vía cambia su denominación, ya no era la Sígsig-Gualaquiza-Amazonas, la llamaron Sígsig-Gualaquiza y, posteriormente, por ser de interés nacional retoma el nombre de Sígsig-Gualaquiza-Cenepa.
En 1972 llega el primer vehículo al sector El Colombiano, y se suspenden los trabajos hasta enero de 1981, año en que reinicia la obra el Gobierno de Jaime Roldós, alcanzando con el movimiento de tierra hasta el centro de Chigüinda a inicios de 1984. Aquí nuevamente se suspende con el gobierno de Febres Cordero hasta que, en 1995, el arquitecto Sixto Durán Ballén, con un préstamo de Argentina, reinicia la obra uniendo las provincias de Azuay y Morona en 1998. Desde ese año y con los gobiernos que se han sucedido, el proyecto ha carecido de presupuesto, incluso en el inventario de la red vial nacional no constaba la Sígsig-Gualaquiza.
La promesa cumplida
El presidente Rafael Correa Delgado, en julio de 2011, incluye a esta carretera dentro de la Red Vial Estatal y contrata un nuevo estudio desde Sígsig hasta Gualaquiza, con un nuevo trazado para que la carretera no sea únicamente vía secundaria, sino que se le considere como principal con una dimensión transversal de 9,20 metros, para transporte pesado. Se incluyen obras complementarias en los centros parroquiales como la red de agua potable, el alcantarillado, el asfaltado de calles adyacentes y otras que, de la misma manera, congratulan a los pobladores y los motiva a ser reconocedores de la labor del señor Presidente, pues el beneficio, según los habitantes, es grande para las poblaciones.
Según la Teniente Político, las aspiraciones de los pobladores son mejorar la agricultura, la ganadería y, sobre todo, emprender una nueva actividad: el turismo, ya que desde la entrada del Matanga se puede observar la naturaleza en su plenitud; son atractivos principales las cascadas, las playas y la selva, no solo para el turista extranjero sino también para los ecuatorianos en general que pueden llegar hasta este lugar paradisíaco.
Autoridades y moradores de la parroquia Chigüinda esperan una buena fiscalización y que la constructora cumpla sus cronogramas establecidos, como lo han venido haciendo, y que la vía sea inaugurada en la fecha establecida en el contrato.
Pueblos y personajes gestores de esta obra nacional
Sígsig ha sido escenario de grandes encuentros para ponderar la necesidad de construir esta carretera a la que alguna vez se denominó Sígsig-Amazonas. Personajes sigseños como los articulistas Rafael Pesantez y David Samaniego Torres, a través de los diferentes medios periodísticos del país, daban a conocer la importancia de edificar esta carretera; así mismo, el extinto padre Luis Rodríguez encabezaba las grandes comisiones para dirigirse hacia Quito a presentar este imperioso requerimiento para los ecuatorianos porque se sabía que con esta obra se podía defender la zona que constituye el valle del Cenepa y por ende, la cordillera del Cóndor.
Chigüinda ha sido escenario de concentraciones de muchas comisiones de autoridades que venían desde Quito y el Austro para ofrecer la construcción de la carretera, que cada vez encontraba una nueva postergación y existían momentos en parecía que cualquier acción iba a quedar en el mero ofrecimiento.
Lo mismo ha sucedido con las parroquias El Rosario y Bermejos, esta última que hoy cumple 70 años de parroquialización en medio de la alegría, no solo de sus habitantes, sino de quienes hoy visitarán este sector que dista a unos 5 kilómetros del centro de Chigüinda; un pueblo que igual ha luchado arduamente por ver cristalizada la construcción de una carretera de penetración al Oriente ecuatoriano, como dicen sus habitantes que esperan pronto la inauguración de la tan anhelada vía que va acorde a las que tiene el país en la actualidad.
“Hoy estamos muy agradecidos con el Gobierno, confiamos que se incremente el rubro de obras complementarias para el asfaltado de tramos hacia las comunidad legendarias por sus encantos naturales”, manifestaron.