Mediante un reciente comunicado, la Cámara de Transporte de Cuenca exige la elevación del precio de los pasajes urbanos en esa ciudad.

El gremio alega que las tarifas no fueron revisadas desde el 2003, por lo que piden una remuneración adecuada para “garantizar la calidad, regularidad y continuidad del servicio”.

Este manifiesto se da luego de que se suspendieron los trámites en el Concejo Cantonal para poner en vigencia lo acordado en septiembre del año anterior, que consiste en elevar a $ 0,30 el pasaje para los usuarios, más $ 0,01 por cada pasajero; esto último será subvencionado por la Municipalidad azuaya.

El documento, firmado por los gerentes de las siete empresas de transporte, piden la “vigencia inmediata” de la tarifa de $ 0,31 y que luego se ajuste a la del tranvía.

Los directivos añaden que están “comprometidos” con mejorar el servicio, pero no con el pasaje actual.

El concejal Xavier Barrera señaló que no se ajustará la tarifa si no se mejora el servicio previamente. “El gremio del transporte debe cumplir los compromisos para dar paso al alza de pasajes, que estarán en la ordenanza”.

Una de las exigencias es renovar el parque automotor en su totalidad, es decir, las 475 unidades que operan en la capital provincial.

El edil calificó como político el pronunciamiento de la Cámara y “no de carácter técnico. Siempre se busca un pretexto para no cumplir con la calidad”.

El representante legal de dos de las operadoras, Rubén Calle, indicó que las empresas no se oponen a la renovación de la flota, tampoco a las exigencias, pero consideran que el plazo de 21 meses otorgado no es suficiente para el cambio. (I)