Los moradores de la parroquia San Sebastián, al oeste del centro histórico de Cuenca, entregaron una carta al director provincial del Consejo de la Judicatura, Esteban Flores, solicitando la selección de un Juez o Jueza de Paz para la comunidad.

La petición se desarrolló luego de varias jornadas de socialización sobre estos temas, emprendidas por el Programa de Mediación, Justicia y Cultura.

El plan tiene como objetivo designar 50 jueces que garanticen la tranquilidad en todas las provincias durante este año.

El proceso cuenta con diferentes etapas: la primera se relaciona con el diagnóstico y acercamiento comunitario; la segunda, sobre la socialización de la información; y, finalmente, la última, referente a la elección de la dignidad.

Durante estos 3 procesos, los facilitadores de la iniciativa difunden las problemáticas, responsabilidades, principios, características y competencias de la autoridad de designada.

Pablo Lazo, presidente del Barrio Las Caleras dijo: “estoy seguro que van a hacer real la ayuda, porque necesitan resolver conflictos que se dan diariamente y requieren de una persona con cercanía y de confianza de la comunidad”.

El titular de la Judicatura del Azuay explicó que “la justicia extraordinaria, que busca soluciones a través del diálogo, que evita los litigios, la confrontación y los tribunales, es la justicia que la institución busca y promueve”.