Según agentes de la Policía Nacional, que participaron en la detención de los supuestos responsables de la muerte de Juan Antonio Serrano, en la madrugada del domingo, los jóvenes -seis en total- estaban en estado etílico.

Uno de los uniformados  dijo que los jóvenes fueron capturados en la calle Bolívar y Borrero, donde sacaban dinero. “No presentaron resistencia al momento de la detención. Cuando les dijimos que estaban detenidos por la muerte de una persona se pusieron pálidos y comenzaron a llorar”. Los implicados, entre ellos el que quedó en libertad, no se despertaba de la borrachera. 

Según los agentes, las cámaras de vigilancia ayudaron a la captura de los sospechosos. Las tomas muestran cómo los jóvenes salen de la casa tras una gresca de “todos contra todos”.

Con las primeras investigaciones, se conoce que los dos carros, luego del incidente, se dirigieron a la calle Larga, luego  por la avenida Solano, en donde realizaron una compra, posteriormente avanzaron hasta el mercado 27 de Febrero y en el sector de la Escuela de Bomberos arrojaron el arma con la que fue asesinado el hermano del Ministro del Interior.

Según el agente, los muchachos fueron a una casa particular para pedir agua y lavarse las manos. Tras ello regresaron al centro, donde fueron capturados. “Decían que no sabían que se había cometido el crimen”, indicó el oficial que participó en el operativo.