Lluvias tienen en alerta a dos provincias del sur
Viviendas destruidas y poblados incomunicados son los resultados de las fuertes lluvias que caen en Zamora Chinchipe y la parte alta de El Oro.
En esta última provincia, el cerro que está a un costado de la parroquia San José, del cantón Atahualpa, sigue generando preocupación entre los habitantes de sus inmediaciones ya que en cualquier momento podría ceder.
Desde que se emitió la alerta naranja, hace más de un mes, ya se han destruido siete casas y 30 familias han sido afectadas, según un informe de Rosa Cabrera, titular de la Dirección Provincial de Gestión de Riesgos El Oro.
En días pasados, la entidad realizó encuestas y recomendaciones puerta a puerta para que los habitantes optasen por salir de sus viviendas y se dirigieran a cualquiera de los dos refugios instalados en el cantón. “La carretera que conecta a esta parroquia con la cabecera cantonal de Atahualpa está obstruida con el lodo que baja del cerro. Sin embargo existen vías alternas para lograr el acceso”, manifestó.
Los moradores aseguran que en las noches no pueden conciliar el sueño ya que las lluvias han sido constantes en los últimos días. “La situación es crítica, no podemos descansar con tranquilidad, peor cuando llueve. Peligra la parroquia. Esto viene de hace dos años”, expresó Segundo Eduardo Jaya, residente del lugar.
En el cerro se evidenciaron grandes grietas de entre 10 cm y 25 cm en extensiones mayores a 5 metros. El 8 de mayo mediante resolución la parroquia San José fue declarada en alerta naranja, debido a que el cerro cada vez estaba más endeble, poniendo en riesgo a 400 personas que habitan en la zona.
Deslaves continúan
Hasta ayer se mantenían 19 puntos críticos entre Zamora y Loja. Las lluvias han provocado varios deslizamientos que impiden la normal circulación vehicular.
Jorge Gálvez, director del Ministerio de Transporte y Obras Públicas de Zamora, dijo que la situación se complica cada vez más porque la tierra sigue bajando en varios tramos, lo que hace difícil también la movilización de la maquinaria para realizar la limpieza.
Hoy podría habilitarse el tráfico por la ruta, luego de retirarse el material que cae de las montañas. Ayer se produjo un alud en la vía Palanda-Zumba. Un paso provisional fue construido para que los vehículos pudieran acceder de un lugar a otro. En el sector, la calzada cedió sin que se produzcan víctimas mortales o heridos, pues en ese momento no pasaba ningún automotor.
“Las lluvias continúan y con fuerza en toda la provincia. Le pedimos paciencia y comprensión a los ciudadanos, sobre todo en la vía Zamora-Loja, donde existen mayores problemas”, dijo Gálvez.
Las cooperativas de transporte y los campesinos aún no pueden evaluar el perjuicio que ello les causa hasta que concluya el temporal.