Las deudas de los municipios de El Oro bordean los $ 26 millones
Autoridades municipales de 5 cantones orenses y uno azuayo revelaron que recibieron las entidades con elevadas deudas.
Más de $ 26 millones sumarían en total las obligaciones de los cabildos de Arenillas, Portovelo, El Guabo, Balsas, Huaquillas, en El Oro; y Ponce Enríquez, en Azuay.
El alcalde de Arenillas, John César Chérrez, afirmó que las cuentas por pagar de ese ayuntamiento ascienden a $ 10 millones. Indicó que el objetivo es informar a la población de cómo recibieron la institución municipal.
“No estamos aquí para sentenciar o determinar si hubo alguna causa dolosa, para eso está la Contraloría”, dijo.
Expresó que entre las novedades encontradas está la contratación de un paquete de 9 obras de regeneración urbana, por un monto de $ 4’720.688,12.
Explicó que a excepción del parque de La Madre, con un avance del 14.49%, y los bordillos de varias calles con el 3,9% de construcción, las demás obras están en cero.
“Estas son las únicas obras de todo el paquete que se encuentran en construcción pese a que se ha invertido $ 111.809 mediante un fideicomiso firmado con el Banco Central que son debitados mensualmente desde enero en cuotas de $ 64.700”, aseveró.
Añadió que son $ 4’720.688 los que debe pagar el Municipio a un interés del 8% a 10 años plazo.
En El Guabo, según sus autoridades, ocurre una situación similar.
El alcalde, Guillermo Serrano, manifestó que luego de haber revisado la situación de cada uno de los departamentos se develó esta situación. “Los problemas van desde subdivisión de contratos, cobros indebidos, saqueo de bienes públicos, entre otros”, dijo.
Explicó que entre 2012 y 2014, se habrían suscrito 44 contratos por un valor de $ 142 mil, los cuales sostiene fueron “entregados a dedo”.
En Balsas, las obligaciones sumarían $ 2 millones, monto que supera el presupuesto anual.
En Portovelo, la alcaldesa Paulina López, también denunció irregularidades de sobreendeudamiento en su Municipalidad.
Manuel Espinoza, titular del cabildo de Ponce Enríquez, mencionó que uno de los principales problemas que heredó de la anterior administración es la deuda de aproximadamente $ 2 millones.
“Hay un mal manejo de los recursos en diversas áreas de la municipalidad. Por ejemplo, se debe cancelar $ 750 mil al contratista encargado del Proyecto Regional de Agua Potable” aseguró.