Las mujeres con excedente pueden acercarse al banco de leche
Hasta julio, más de 2 mil madres donaron su leche
De 20 a 25 madres acuden cada día al Banco de leche del Hospital Vicente Corral Moscoso. De ellas, entre 4 y 5 son donantes voluntarias, mientras que la mayoría son madres de recién nacidos que se encuentran en el área de neonatología.
En julio, el Banco logró acumular 75 litros de leche y hasta el 21 de agosto tenía 42 litros. “Hasta el momento el Banco está abasteciendo al área de neonatología, pero esto no siempre ocurre. Hay meses que estamos con un stock suficiente y hay meses que nos falta”, dijo Mónica Bonifaz, nutricionista, quien explicó que esto depende del número de recién nacidos que se encuentren en neonatología y de las madres donantes.
Los beneficiados de los bancos de leche humana son los bebés prematuros y de bajo peso al nacer, los recién nacidos de madres con VIH y aquellos que no pueden ser alimentados por sus madres por otras causas. Para ser donantes, las madres deben confirmar su estado de salud con exámenes para saber si son aptas, que estén dando de lactar a su hijo, que tienen excedente y que quieren ser donantes voluntarias.
Entre 2011 y 2014 unas 9.166 madres donaron leche materna en esta casa de salud. De enero a julio de este año, 2.379 lo han hecho.
Érika Canilema, de 18 años, es madre desde hace 5 meses y es una de las donantes. “Fui solo una vez porque yo veía a otros niños en la incubadora y sus madres no tenían leche, por eso sentí la necesidad de ir a donar”, dijo.
El proceso para donar —explicó— no es complejo. “Primero tenemos que asearnos y luego una máquina extrae la leche. Esto toma unos 10 minutos”, dijo.
La nutricionista Bonifaz explicó que luego la leche extraída es pasteurizada y se la puede almacenar en un congelador hasta por 6 meses.
El Banco de Leche, además de ser un espacio en donde se recolecta, procesa, almacena y distribuye gratuitamente la leche para los infantes de esta casa de salud, también se promociona la lactancia materna.
De esta manera, se explica a las madres su importancia, técnicas y cómo equilibrar la lactancia con el trabajo.
Sandra Vile, madre de un recién nacido, desconocía que ella misma podía extraer su leche y almacenarla para que otro familiar alimente a su hijo mientras trabaja. “Yo no estoy trabajando por cuidar a mi hijo. Ahora ya sé que primero debo esterilizar un vaso de vidrio, luego tengo que recogerme el cabello, sacarme los aretes, el anillo y lavarme los senos para sacarme la leche”, señaló.
Esta leche, de acuerdo con Bonifaz, puede mantenerse al ambiente por 6 horas; en refrigeración, de 24 a 72 horas y congelada puede mantenerse hasta 15 días.
“Para administrarla al bebé se la calienta a baño María. Con esto logramos que el niño pueda seguir alimentándose con la leche de su madre mientras ella se encuentra en el trabajo. Es un gran servicio a la comunidad”, acotó.
La especialista insistió en que la leche materna es primordial para el desarrollo del bebé porque es el alimento más completo, además contiene inmunoglobulinas y otras sustancias que protegen al bebé frente a infecciones. (I)