La provincia de El Oro se encamina a terminar  2012 con unos 200 casos de contagio del Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida (sida).

Al menos eso es lo que estima el Departamento de Epidemiología.

Su cálculo se justifica en el hecho de que al primer semestre del año ya van 101 infectados, mientras que    2011 cerró con 194 personas enfermas con el VIH.

Según estadísticas de este mismo organismo, desde que se detectó el síndrome en la provincia -en 1989- hasta la fecha se han contagiado 1.500 personas y de estas han muerto 324. Julio Palomeque, jefe del departamento de Epidemiologia, expresó que teóricamente en este año se terminaría con más de 200 casos.  Aseguró que este aumento de infectados por el VIH/sida en la provincia se debe a un problema cultural en el cual el machismo y la multiplicidad de parejas sexuales contribuyen a la propagación.

Por ocupación, dijo, los más afectados siguen siendo obreros que acuden regularmente a prostíbulos y mantienen relaciones con distintas mujeres, casi siempre sin protección. En segundo lugar están las amas de casa que son contagiadas por sus propios esposos. “De ahí siguen los comerciantes, quienes al tener más dinero en sus manos son más fáciles de caer ante los encantos de una chica que quizás ni ella misma sepa que tiene la enfermedad o resulta ser solo portadora”, explicó.

Según las estadísticas históricas de casos fatales, 2009 fue cuando se produjo la mayor cantidad de muertes. Un total de 38.

De ahí  siguen  2001, con 27 fallecidos; y  2004, con 23. El año pasado, el territorio orense se ubicó en el cuarto lugar por nivel de incidencia del VIH/sida en el país.

Actualmente la región con  mayor incidencia de la mortal enfermedad es Guayas, seguida de Pichincha, Manabí, El Oro y Los Ríos.

Ángel Rivas, activista de la organización GLBT Sembrando Futuro, aseguró que están trabajando con prevención y capacitaciones en las zonas donde son más propensas las personas que contraigan esta enfermedad.

Aseguró que el 80% de los hombres no se hace el examen.

“Muchas de las personas se enteran cuando ya es muy tarde, algunas no se quieren hacer la prueba por temor al rechazo”, destacó.

Rivas, al momento de la entrevista, se encontraba acompañado de una persona que contrajo la enfermedad hace dos años.

Él  pidió que no se revele su nombre, porque pocas personas en su familia sabían de su contagio.
“Al momento que me dieron los resultados me sorprendí bastante. Soy una persona que siempre me he estado cuidando en mi salud. De un momento a otro, no sé qué pasó, pero me salió positiva la prueba. No niego que pensé en el suicidio en ese momento, pero acudí a alguien para que me ayudara”, mencionó con voz entrecortada.

“No es como la gente señala, más bien son los  heterosexuales con un comportamiento promiscuo quienes inciden en el contagio. Son los maridos los que, en la mayoría de los casos, llevan a la casa el problema y lógicamente se infecta la esposa”, afirmó. Los cantones más afectados por la presencia de la enfermedad son Machala, Pasaje y Santa Rosa.
En El Oro, los homosexuales y trabajadoras sexuales evidencian bajos niveles de incidencia de esta enfermedad.

En  estos días se programó  una reunión de trabajo con todas las organizaciones públicas y privadas que, de manera directa o indirecta, trabajan con el tema del VIH/sida, con la finalidad de ayudarlas en consejería, laboratorio y ayuda directa a los pacientes.