Descansando sobre una banca del parque Diego Minuche Garrido, de Machala, encontramos a Juan (nombre protegido), quien había recorrido varias cuadras del centro de la ciudad, cargando un envase de gaseosa de 3 litros para venderla por vasos.

De contextura delgada, con el pelo corto y vistiendo una camiseta negra a rayas, jeans rotos y zapatos deportivos, el chico descansaba. Cada uno de sus movimientos va al compás del reguetón que suena en un audífono sobre su oreja. “Trabajo hasta las 17:00”, revela el joven que desde su hogar en el barrio Urzesa 2 al norte de Machala, camina de lunes a sábado hasta el centro de la ciudad para ofrecer las gaseosas.

El abrasador sol de la tarde es aprovechado por Juan para ofrecer a los transeúntes sedientos la bebida bien helada. Él tiene 13 años y desde el mes de marzo, tomó la decisión de salir a las calles a vender cola en vaso.

Cuenta que su familia no tuvo los recursos para enviarlo un colegio a seguir estudiando y ahora él es un sustento para el hogar (madre y hermanos), ya que el padre los dejó abandonados cuando él tenía 2 años.

Juan es parte de las estadísticas de trabajo infantil en la provincia de El Oro. El año pasado, el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) rector de la política pública de la niñez y adolescencia, reportó 3.950 niños que laboraban en diferentes actividades. En 2014 el índice se ha reducido a 3.126 menores trabajando, cifra que no deja de ser preocupante ya que el trabajo de reciclaje en la fuente se ha incrementado al 30%.

La provincia de El Oro es netamente bananera y por ello abre miles de plazas de trabajo, entre ellas, para menores de edad; la Cartera de Estado ha detectado niños laborando en las fincas bananeras, la cifra llega al 6%. Las autoridades han desarrollado diferentes programas sacar a los niños de esos trabajos  y precautelar sus derechos.

Firman convenio en beneficio de menores

La atención a 1.550 niños y niñas en riesgo y en situación de trabajo infantil de los cantones Machala, Pasaje, El Guabo y Chilla se fortalece. Tres Municipios, el MIES y la Prefectura firmaron la semana pasada los convenios para continuar ejecutando los proyectos hasta fin de año. Estos convenios permitirán que la Prefectura de El Oro atienda a 700 niños y niñas en Machala; el Patronato Municipal de El Guabo, a 400; el Municipio de Pasaje, a 350 y el Municipio de Chilla a 100. La inversión anual sobrepasa los $ 600 mil en estos cantones que conforman el Distrito Machala. El MIES atiende a 4.950 niños y niñas en la provincia, los 3.400 niños y niñas restantes son atendidos por el Mies, Distrito Piñas a través de convenios con los 10 municipios de la parte alta y de la frontera.

“Reafirmamos el compromiso del Gobierno Nacional con la erradicación de un problema que afecta al desarrollo de niños y niñas y los priva de la educación y el juego”, enfatizó Paúl Alulema, jefe Político de Machala, en referencia a la lucha contra el trabajo infantil.

Gary Vera, Director del MIES, Distrito Machala, exhortó a las entidades ejecutoras a fortalecer las acciones en sus comunidades para junto con las instituciones del Estado central atender los casos de niños, niños y adolescentes en situación de trabajo infantil y mendicidad. Lo que harán es identificar a los menores que trabajan, abordar a sus familias y, de acuerdo con los problemas encontrados, intervenir de manera articulada con los Ministerios de Educación, Salud, Relaciones Laborales y otras instituciones. En El Oro hay 4.950 menores atendidos por los proyectos, el 63% (3.126) trabaja y el 37% (1.824) no trabaja.

Reciclaje se incrementa entre los menores de edad

El reciclaje no es ajeno en las calles de la ciudad, principalmente en la noche, se ve a familias enteras recolectando botellas, cartones, vidrios y metales, situación que pone en riesgo la salud e integridad de los niños, niñas y adolescentes que acompañan a los padres.

Este tipo de labor se ha ido incrementando y, según las estadísticas que maneja la Prefectura de El Oro, llega al 30% del universo laboral infantil. El trabajo en jornal está al 8%; el 14% en el trabajo doméstico; 25% en actividades agrícolas; el 6% en bananeras y el 6% en la calle. El 98,5% de los niños que atienden los programas asisten a la escuela y el 1,5% no asiste.

Respecto a las condiciones laborales, los datos señalan que 1.688 están en trabajo familiar no remunerado; 918 laboran por cuenta propia y 520 son asalariados.

En 2012, Ecuador se declaró libre de trabajo infantil en basurales, como resultado del trabajo articulado entre el Gobierno y los municipios locales.