El bosque petrificado de Puyango, uno de los patrimonios culturales del Ecuador, perteneciente a la provincia de El Oro, se ha convertido en un destino turístico tanto para estudiantes, como para visitantes nacionales y extranjeros.

En 2011 recibió a 14.000 personas, aproximadamente, y este año, los responsables esperan aumentar esa cifra.

Está ubicado al sur oriente de Ecuador (a 120 kilómetros de Machala) y su antigüedad se calcula en más de 100 millones de años.

Cubre 5.000 hectáreas, de las cuales 2.658 han sido declaradas Patrimonio.
Es el bosque petrificado más remoto de vida animal y vegetal que existe en el planeta. “ Este lugar es la mayor área conocida de madera petrificada expuesta en América del Sur”, afirma Gloria Rentería, una de las guías.

Añadió que el sitio está lleno de las reliquias de lo que una vez fue un floreciente bosque de árboles de araucarias que fueron convertidos en piedra.

“Aunque no resulta poco común encontrar bosques petrificados, sí resulta raro que los árboles fosilizados sean de la familia de las araucarias. Por esta razón es un importante sitio de investigación para los geólogos”, expresó.

Los visitantes podrán encontrar troncos de hasta 20 metros de alto y 1,6 metros de diámetro.
Algunos fósiles son extraordinariamente detallados y es posible observar cada uno de los anillos de los troncos petrificados.

“Cada aro representa 10 años de vida del árbol, podemos ver que este pretino tiene 21 anillos, quiere decir que tendrá, aproximadamente, 210 años”, mencionó.

Lo intrigante, según Rentería, es que la especie de araucarias no es originaria del sitio.
La guía mencionó que “los árboles vinieron arrastrados desde Chile por grandes movimientos tectónicos en la era cretácea, hace millones de años, cuando se formó la Cordillera de los Andes”.

También están los extremos de la vida animal, desde los moluscos petrificados, hasta más de 120 especies de aves, muchas habituales y otras en peligro de extinción.

Al sitio llegan turistas de diferentes partes del mundo, mientras que a nivel nacional los principales visitantes son de Azuay, Loja, El Oro, Pichincha, Guayas y Manabí.

Paúl Moreno, coordinador zonal del Ministerio de Turismo, dijo que han emprendido varios proyectos con la finalidad de atraer más personas. “Muy pronto ya nos entregarán los nuevos senderos que hemos realizado, para que se extienda más la visita”, indicó.

Los comuneros y guías pidieron más apoyo de parte de las autoridades. Según ellos, están en medio del atractivo turístico, pero faltan más restaurantes y hoteles.

Agregaron que hay problemas ambientales como la contaminación del río Puyango, producto de la explotación de oro que se cumple artesanalmente. Otro inconveniente es la deforestación, especialmente, en los meses de noviembre y diciembre, que los campesinos queman para sembrar y el mal uso del suelo. “Las partes que están aún cubiertas por vegetación son aquellas que están en manos del Estado, el resto es de pastizales”, acotaron.