El inicio de clases en la provincia de El Oro no fue normal. Estuvieron de por medio los reclamos de los padres de familia que pidieron que se asigne un cupo para sus hijos.

Debido a ello, se registraron grandes aglomeraciones en los distintos establecimientos e incluso hubo quienes abordaron a las autoridades educativas para pedir explicaciones sobre la falta de espacios en las escuelas y colegios.

En el Distrito Machala son al menos 56 mil nuevos jóvenes quienes ingresaron al sistema educativo fiscal, según indicó Ernesto Novillo, director de la zona.

Añadió que en la provincia sería al menos un 20% de niños quienes tendrían problemas de asignación. Para Novillo, el contratiempo radica en la falta de información y los cambios de última hora.

Desde la semana pasada, el Distrito de Educación recibió a decenas de padres que intentan inscribir a sus hijos. Ayer, había unos mil familiares que hacían cola desde la madrugada.

Un contingente policial brindó seguridad y también controló a los enfurecidos progenitores, para evitar que ingresen a la fuerza.

El Distrito Machala lleva atendiendo a 400 madres y padres por día, desde el miércoles de la semana pasada.
En las últimas horas esperaban duplicar esa cifra.

Beatriz Belduma, una madre de familia que se quejaba porque su niña no salía en el sistema, increpó a los funcionarios de Educación. “Son 3 veces que la he inscrito, pero en ninguna me sale. Tengo miedo de que se quede sin estudiar”, dijo muy preocupada la mujer mientras permanecía en la fila con un paraguas que la cubría del radiante sol que soportó la capital orense, la mañana y tarde de ayer.

Así como Beatriz, estaba Bertha Salgado. Su preocupación era que su hija, quien en primera instancia, estaba inscrita en una escuela cerca a su domicilio, ahora ya no aparece en el sistema. Cuando fue a averiguar a la institución educativa, lo único que le dijeron era que “vaya a preguntar al Distrito porque en el plantel ya no había cupos”. Salgado está indignada porque ya adquirió el uniforme de esa institución.

María Lorena Reyes, coordinadora zonal 7 del Ministerio de Educación, aseguró que ningún niño se quedará sin estudiar. Por ello, ya están resolviendo los problemas que se suscitan principalmente en Machala. La funcionaria, quien llegó a la ciudad para dar por inaugurado el periodo lectivo 2014-2015, explicó que el inicio de clases se va a cumplir de acuerdo con lo establecido.

Mañana entrarán los niños de octavo, noveno y décimo año; el 7 de mayo, alumnos de quinto, sexto y séptimo; el 8 de mayo, estudiantes de segundo, tercero y cuarto año; el 9 de mayo, los chicos de primer año de educación general básica y el 2 de junio, los de educación inicial.

A la provincia fueron destinados $ 7 millones, para la reparación de 57 instituciones educativas, uniformes y aulas móviles.  

La coordinadora zonal dijo que para este año la metodología de ingreso permitió que todos los niños, niñas y adolescentes que ya forman parte del sistema educativo fiscal, cuenten con matrícula en forma automática.

Por eso estos chicos no necesitaron realizar ningún trámite adicional.

Al evento de inauguración, también asistieron el gobernador, Pablo Granda, un delegado del Distrito de Educación y la rectora del colegio Nueve de Octubre, quienes dieron la bienvenida a los aproximadamente 500 estudiantes de bachillerato. Agregó que se destinaron 36.496 paquetes de uniformes para la provincia.

En la infraestructura se invirtieron $ 3’500.000 para la zona 7, el 74% corresponde a El Oro, con ello se busca favorecer a 93 centros educativos.