Machala-Esmeraldas-Latacunga.-

El reciente oleaje volvió a desnudar la vulnerabilidad en que se encuentran los habitantes de la isla de Jambelí, en El Oro. Sin embargo, este balneario no es el único en peligro por este evento natural, pues el inminente aumento de la intensidad del fenómeno de El Niño pone en alerta a las autoridades machaleñas por los riesgos que pueda causar en las endebles casas edificadas sobre el canal El Macho.

Ayer, los técnicos de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR) recorrieron la zona del estero, al norte de la capital orense, donde identificaron que al menos las casas de unas 300 familias están en peligro de que se desplomen.

Ricardo Peñaherrera, subsecretario de la entidad, dijo que ya han comunicado al Municipio para que las reubiquen en un lugar seguro. En el sitio, desde hace 20 años, se erigen frágiles viviendas a lo largo de unos 5 km.           

El año pasado, 4 casas se cayeron debido a las torrenciales lluvias que se presentaron en la zona. En el estero desembocan miles de redes de alcantarillado domiciliarias y residenciales, las cuales luego son descargadas directamente al mar sin ningún tratamiento. Ello estaría afectando la salud de las familias que se encuentran asentadas en dicho sitio.

Hundimientos y deslaves  

En el subtrópico de la provincia de Cotopaxi las lluvias comenzaron a causar inconvenientes. Hace unos días se produjo el hundimiento de un trecho de la vía Guayacán-Guasaganda, sector El Tesoro, de la  parroquia El Tingo La Esperanza (Pujilí). Las últimas precipitaciones causaron un deslizamiento de tierra que amenaza a tres viviendas.

La maquinaria del Gobierno Provincial construyó un acceso alterno en el recinto El Tesoro, para habilitar el paso entre Guayacán y Guasaganda. En esta última comunidad ocurrió el mayor daño y allí precisamente estuvo el equipo pesado compuesto por una excavadora y tres volquetas que concluyeron su trabajo a mediados de semana.

Segundo Santamaría, director de Obras Públicas del GAD Municipal de La Maná, dijo que los aguaceros empezaron los primeros días de enero y se intensificaron. El miércoles se reunió el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) para evaluar la situación.

En la parroquia Palo Quemado, del cantón Sigchos, ocurrieron más de 10 deslizamientos desde el domingo, por lo que se ejecutan trabajos para retirar el material.

A la zona acudió la maquinaria que se encontraba en Las Pampas y el equipo del Municipio de Sigchos. Sin embargo, entre las comunidades San Pablo de la Plata y La Florida hubo dificultades para realizar la limpieza.

Mientras tanto, tras superar los problemas ocasionados por los lahares, ayer se reabrió el Parque Nacional Cotopaxi, que había sido cerrado el miércoles.

Un informe del Ministerio Coordinador de Seguridad señaló que “la reapertura está sujeta a ciertas medidas de seguridad que no guardan ninguna relación con el proceso eruptivo, sino que son consecuencia de las fuertes lluvias suscitadas en los alrededores del volcán”.

Entre tanto, el Ministerio de Turismo recomienda a los turistas que visiten el Parque seguir las recomendaciones que imparten el personal y los guardaparques que trabajan en el área. La zona protegida es visitada anualmente por miles de turistas nacionales y extranjeros.

Al menos 300 familias viven en frágiles casas de caña levantadas sobre el estero El Macho. Las moradas pueden colapsar si es intenso el fenómeno El Niño. Foto: Fabricio Cruz / El Telégrafo

Vías bloqueadas

Un deslave de tierra taponó un tramo de la carretera estatal Atacames-Pedernales (E15).

El incidente sucedió en el sector de Mompiche, que une al sur de la provincia de Esmeraldas con el norte de Manabí. El cierre parcial de este trecho, parte de la Troncal del Pacífico, es controlado por la Policía Nacional, según reportó el SIS ECU-911 de Esmeraldas.

Roberto Gámez, director provincial del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), dijo que el equipo técnico de la institución realiza el mantenimiento en varios sectores de la red estatal a fin de que las vías estén expeditas.

Aseveró que al norte de Esmeraldas, en el eje vial E-10 que conecta la provincia costera con Imbabura (en el sector Minas Viejas), se realiza el despeje del material caído por el desprendimiento de taludes provocados por las lluvias.

En Estero Ancho y Daule, de la vía Esmeraldas-Pedernales, se avanza con la construcción del drenaje, reposición de alcantarillas y mejoramiento de la calzada.

En el sector El Vergel, de la vía Santo Domingo-Quinindé-Esmeraldas, tras el colapso de la plataforma continúan los trabajos de mantenimiento preventivo para la conformación y mejoramiento de la ruta. Así también, se realizó el mejoramiento del tablero del puente sobre el río Quinindé. En esta misma vía se procedió con la inmediata intervención en el sector de Sague, donde se produjo un deslave debido a la falla de una tubería de agua potable; mientras que en el Km 30 de la E20 se retira el material en la vía.

En días pasados hubo un deslave en la carretera Esmeraldas-Tabiazo-Carlos Concha, que afectó a los campesinos de la zona, pero ya se abrió el paso. (I)

DATOS

Los balnearios de Jambelí y Bajo Alto (El Guabo), en la provincia de El Oro, son monitoreados por las cámaras del sistema de vigilancia ECU-911 de Machala.

Un alud fue reportado en los kilómetros 43 y 49 de la carretera Nanegalito-Quito. Hasta el cierre de esta edición la ruta estaba habilitada un 80%. Uniformados orientaron a los conductores.

Maquinaria del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) retiró el material que descendió sobre la calzada de la vía Cuenca-Molleturo-Puerto Inca. Las lluvias causaron derrumbes que no alteraron el tránsito.

Desde ayer rige un nuevo período de oleaje. En el mar cercano a las playas, donde se desarrolla la mayoría de las actividades turísticas, se prevén olas con alturas superiores al promedio normal, formación de corrientes de resaca, movimiento de sedimentos y mar agitado. (I)

La maquinaria de varias entidades retira las piedras y el lodo que bajan de las montañas en Cotopaxi. Foto: Silvia Osorio / El Telégrafo