Desechos de relaveras contaminaron sembríos
Cientos de hectáreas de plantaciones de banano y cacao, en la parroquia Tenguel (Guayas) y en parte del cantón Camilo Ponce Enríquez (Azuay), resultaron afectadas por los desechos de una relavera que colapsó la semana pasada.
Estas siembras se abastecen con el agua de los ríos Chico y Gala, a donde fueron a parar los residuos provenientes del sector de Shumiral.
Los dueños de varias fincas de Tenguel suspendieron el riego por 15 días, ya que presumen la presencia de tóxicos en los caudales, toda vez que el líquido presenta un color gris.
Son 1.800 hectáreas de sembríos de banano y 1.500 de cacao las que están afectadas. El Comité de Operaciones Emergentes (COE) cantonal se activó para evitar que el agua de esos ríos llegue a las vertientes que proveen del líquido vital a la población.
Las autoridades recomendaron no consumir el agua de los ríos Chico y Gala por 15 días. Luego de este lapso, realizarán otra inspección para analizar si el líquido es apto para el riego. “Hemos decidido no regar porque a futuro nos puede causar problemas con los frutos contaminados. Esto es un desastre para los pequeños productores que vamos a ver afectada en un 60% nuestra producción”, expresó Miguel Guanoquiza, dirigente de la parroquia Tenguel. Advirtió que si no se irriga durante dos semanas el cacao se va a chupar y secar. No se desarrollará bien”, aseguró el dirigente.
En el sector se producen al menos 80 mil cajas de banano por semana, pero después de la relavera se prevé una disminución.
Aproximadamente son 60 los campesinos que serán perjudicados. René Asencio, agricultor de Tenguel, dijo que por ahora solo siguen el procedimiento de corte y lavado del banano. “Nos prohibieron regar. Ojalá no se dañen las plantaciones con el pasar de los días”, indicó.
10 relaveras construidas de manera antitécnica están instaladas a lo largo del río Chico, en ShumiraLEl alcalde de Camilo Ponce Enriquez, Patricio Sánchez, aseveró que el lunes se reunió con el COE cantonal, con funcionarios de la Secretaría Nacional del Agua (Senagua) y técnicos del Ministerio del Ambiente (MAE), los cuales entregaron un informe del grado de contaminación.
Sostuvo que no solo es la relavera de la empresa Portugalia S.A la que colapsó en el sector de Barranco Colorado, sino también otra piscina de cianuro en la minera Paz-Borja. “En estas áreas se ve la mayor contaminación porque existe cianuro, un químico altamente contaminante que mata todo a su paso. Hay afectaciones al sector agrícola, sobre todo en Tenguel; ellos son los que más están sufriendo”, aseguró.
Agregó que en el informe de la cartera de Estado no se menciona a la planta de beneficio Paz-Borja, que sería la mayor contaminante.“Recorrimos el lugar y se comprobó que las mangueras de los tóxicos se habían aflojado accidentalmente hasta el caudal del río. Pedimos que se haga una investigación trasparente”, aseveró.
FUNCIONARIO TEME POR MÁS ACCIDENTES
Según información del Municipio de Ponce Enríquez, al menos una decena de relaveras antitécnicas existen a lo largo del río Chico en Shumiral.
El alcalde, Patricio Sánchez, pidió el cierre definitivo de estas piscinas, pues cree que en cualquier momento podrían colapsar.“Solo están construidas con sacos de nylon”, sostuvo.
La Secretaría Nacional del Agua (Senagua) anunció la apertura de un expediente administrativo en contra de los causantes de la contaminación de los ríos Chico y Gala. En el 2000 ocurrió un percance que acabó con sembríos.
DATOS
La comunidad de San Rafael, en Guayas, sería la más afectada ya que las aguas tóxicas fueron a parar directamente a los canales de riego y al balneario.
Al menos 20 mil metros cúbicos de relaves fueron depositados en los ríos, recorriendo 37 kilómetros.
Las autoridades de Camilo Ponce Enríquez catalogan al hecho como desastre, ya que contaminó a los caudales que unen a las provincias de El Oro, Azuay y Guayas.
Los ríos Chico, Siete, Tenguel, San Gerardo y Gala, de acuerdo con estudios del municipio azuayo, están contaminados.