Ayer la Dirección de Turismo de El Oro y el Instituto de Contratación y Obras (ICO) inspeccionaron los caminos que se construyeron hace más de seis meses para los más de 13 mil visitantes que recibe cada año el bosque petrificado de Puyango.

A este lugar llegan turistas de  Azuay, Loja, El Oro, Guayas, Pichincha y Manabí. Además acuden con frecuencia una gran cantidad de extranjeros. Y es que el bosque  es uno de los atractivos más importantes que tiene el país en la región sur.

En su interior existen especies vegetales o marítimas, y fósiles que datan de más de 120 millones de años. El principal atractivo son los troncos fosilizados, únicos en el mundo. El ejemplar más grande tiene 2 metros de diámetro y 15 metros de largo.

Sin embargo, se han reportado algunos problemas ambientales que están afectando su entorno, como por ejemplo los continuos incendios forestales que se presentan. La comunidad Puyango Viejo es la que se encuentra ubicada al pie de la entrada del complejo turístico.

La misma pertenece, ahora oficialmente, a la provincia de El Oro, cantón Las Lajas.
Por muchos años Loja ubicaba a la reserva como propia,  siendo el río Puyango el límite divisorio. El cantón del mismo nombre pertenece al territorio lojano.

Río está contaminado

Los comuneros de la zona mencionaron  que uno de los problemas ambientales que los aqueja es la contaminación del río por la presencia de sustancias tóxicas. Estas fluyen por sus aguas producto de la minería artesanal que se desarrolla aguas arriba en el cantón Portovelo.

Gloria Rentería, guía del parque, expresó que otro impacto que enfrenta el bosque es la deforestación. Entre noviembre y diciembre se dieron problemas por el corte de árboles.

Además durante esos meses  los campesinos efectúan la quema de suelos para sembrar. “Las partes que están aún cubiertas por vegetación son aquellas que se encuentran en manos del Estado, el resto son pastizales”, dijo Rentería.

Prefectura asume cuidado

Para el manejo del bosque se creó una mancomunidad que está administrada, ahora oficialmente,  por el gobierno provincial autónomo de El Oro.

Esta entidad será la responsable de la preservación y cuidado de los árboles y de todas las especies que se encuentran en su interior. El bosque tiene una extensión de 2.658.04 hectáreas.

En el año 1988, durante el Gobierno de León Febres Cordero, fue declarado  Patrimonio Cultural y desde entonces se le da la importancia debida en el ámbito nacional, pues internacionalmente ya era conocido y visitado por famosos científicos y estudiosos como el alemán Teodoro Wolf.

Este científico en el año de 1870 realizó algunos estudios para conocer el origen de esta encantadora obra de la naturaleza.

Puyango fue en el pasado un mar y  los fósiles  corresponden a organismos marinos. El agua se secó y la tierra fue poblándose de bosques y animales que luego de cientos de años, debido a grandes cataclismos naturales, quedaron sepultados.