Autoridades orenses vigilan los caudales ante posible crecida
Los caudales orenses están siendo monitoreados, desde inicios de semana, por las autoridades con el fin de evitar que las lluvias provoquen su desbordamiento.
La intención es prevenir un desastre en las zonas pobladas que se asientan en las cercanías de ríos, esteros o brazos de mar.
Mediante un sobrevuelo, los principales de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos-El Oro y de la Gobernación inspeccionaron la situación en los principales ríos.
Por el momento, de acuerdo a versiones de los técnicos, los caudales se encuentran en un nivel normal.
Empero, se ha previsto coordinar con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), así como con el Gobierno Provincial de El Oro, el inicio de trabajos en las zonas de riesgo de la parte alta (Piñas, Balsas, Zaruma, Portovelo y Atahualpa), ya que las lluvias cada vez son más intensas.
Y es que el desastre acontecido en el sector de Pueblo Nuevo, cantón Camilo Ponce Enríquez, activó la voz de alerta entre los organismos de control. Los responsables en el territorio orense efectúan recorridos y sobrevuelos.
Frente a ese riesgo han sido visualizadas las cuencas de los ríos: Pagua, Siete, Casacay, Torata, Amarillo, Capiro, Carne Amarga, entre otros. No se detectaron interrupciones en su cauce o un crecimiento alarmante del mismo.
Las cuencas de los ríos de la parte alta de la provincia mantienen un nivel normal, al igual que la del río Jubones.
Carlos Zambrano, gobernador de El Oro, dijo que es recomendable cumplir con un monitoreo constante de la situación de los ríos, así como de las lluvias que se registren en las provincias de Azuay y Loja.
Además, mencionó que se mantendrán activadas las mesas técnicas de los Comités de Operaciones de Emergencia cantonales para promover acciones de prevención.
Zambrano indicó que también hay diálogos con la población para darle instrucciones de lo que se debe hacer en caso de presentarse una emergencia.
Evaluar contaminación
El Gobernador de El Oro se reunió también con los alcaldes de varios cantones para evaluar el nivel de contaminación de los ríos
Algunos caudales que están en ciudades donde se realizan actividades mineras tienen altos niveles de sustancias químicas y metales que afectan a la salud.
Dirigentes y moradores de Portovelo y Zaruma afirmaron que la provincia está amenazada por los numerosos casos de cáncer que ellos atribuyen a la contaminación en el ambiente y en ríos.
Ellos concuerdan en que las actividades de los mineros informales son las causantes de la presencia de sustancias altamente tóxicas en el agua.
“Lo primero que vamos a hacer es hablar con los concesionarios. Les recordaremos que deben cumplir con las normas ambientales”, aseguró el funcionario.
Zambrano añadió que se reforzarán los operativos de control en las zonas donde se efectúan actividades mineras.
Además, advirtió a quienes realizan labores al margen de la ley para que se detengan y eviten así drásticas sanciones.