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Planean un proyecto de regeneración y consolidación del panteón para alargar su uso a 25 años
Al Cementerio Municipal de Cuenca le quedan 10 años de vida útil
Este año, nuevamente cientos de personas llegan con flores, cantos y oraciones al Cementerio Municipal de Cuenca para visitar a familiares y seres queridos.
Este sito declarado Patrimonio de la Nación en 2002, y donde reposan unos 50 mil restos, encierra en sus 7 hectáreas historias, anécdotas, lágrimas, pero también sonrisas. No existen fechas específicas pero se estima que el camposanto tiene más de 100 años. De su vida útil se decía que ya había culminado.
La administración anterior incluso adquirió un terreno en el que se construirá el nuevo panteón municipal, puesto que -según estudios-la vida útil del actual había terminado. Las nuevas autoridades han descartado esto y con un nuevo análisis se determinó que el cementerio de la urbe aún tiene un tiempo de vida útil de 10 años en su estado actual y que, en caso de implementarse algunos proyectos, su utilidad podría extenderse hasta 25 años.
“Había el pronóstico de que el cementerio estaba por colapsar y de que iba a cumplir su vida útil. A mi llegada revisé estudios y se pudo encontrar que para 2013 el cementerio debía haber cumplido su vida útil; sin embargo, como vemos, estamos a puertas de 2015 y todavía tenemos espacio y tenemos mucho por hacer”, dijo Jhoanna Jara, gerente de la Empresa Municipal de Servicios de Cementerio, Sala de Velaciones y Exequias (Emuce EP)
Según el último estudio realizado por la empresa, del área total del camposanto, que es de aproximadamente 7 hectáreas, el 10% (7 mil metros cuadrados) aún pueden aprovecharse. Además, según Jara, el servicio de arrendamiento permite que el uso de las bóvedas sea rotativo.
Todos estos factores, a su criterio, permiten determinar que el panteón municipal aún tiene vida útil. “Lo que necesitamos es seguir construyendo nichos porque ocupan menos espacio. Hemos hecho un estudio aproximado, en el cual sin construir nada de bóvedas y solo un bloque de nichos al año, tendríamos una vida útil mínima de 10 años, pero con un proyecto de regeneración y consolidando las zonas que faltan, podremos avanzar a unos 20 a 25 años”, acotó.
Según Jaime Pesántez, técnico de la empresa, el 40% de las bóvedas que son arrendadas se venden una vez culminado un período de 4 años y el otro 60% se desocupan y vuelven a ser usadas.
En la actualidad —dijo el funcionario—hay 4 mil bóvedas sin vender, de la cuales 2 mil están arrendadas y el resto están en vencimiento. Además, existen de 50 a 60 nichos disponibles, por ello indicó que para el primer trimestre del próximo año se construirá un primer bloque de unos 140 nichos.
El Gobernador anunció al país sobre la obra en 1862
De acuerdo con la investigación de Diego Arteaga Matute, se desconoce desde cuándo surgió en Cuenca la idea de construir un cementerio municipal.
Arteaga, en el libro Personajes Ilustres que reposan en el Mausoleo del Cementerio Municipal Patrimonial de Cuenca, realiza un recuento de diferentes informaciones que existen en torno a su creación.
A inicios de 1823 se hace relación de un expediente para su construcción. La conclusión de las obras del cementerio cuencano es conocida a nivel del país en 1862, en los siguientes términos: “Tengo [yo el gobernador del Azuay] la grata satisfacción de poner en conocimiento de U[sted] [ministro del Interior] que el M[muy] I[lustre] C[oncejo] Municipal ha recibido ya el panteón de esta ciudad, con todas las obras contratadas con el empresario Señor Miguel Heredia, que se ha esmerado en dar al edificio la solidez y belleza necesarias; por manera que, ese establecimiento es uno de los más hermosos que existen en esta provincia, y en su clase, tal vez el mejor de los de la República” (sic).
El texto también indica que durante la segunda mitad del siglo este criterio fue ratificado por un viajero francés Juan B. Guin quien lo señala en 1857 como “lindísimo”, en tanto que en 1889 el historiador ecuatoriano Pedro Fermín Cevallos indica con una opinión ponderada que el local es “un buen cementerio”.
Como fecha general, se conoce que este espacio data de 1869, cumpliendo 118 años de vida útil. En 2002, la parte más antigua de este lugar fue considerada como Patrimonio del Ecuador.
Arteaga señala que esto se dio con base en 7 consideraciones, según Acuerdo Ministerial, entre ellas: “El ‘Cementerio Antiguo’ de la ciudad de Cuenca constituye una zona de gran valor que manifiesta vívidamente la cultura cuencana, expresada en su riqueza histórica, arquitectónica, artística, espiritual y paisajística. La expresión espacial del área —se indica— refleja los diversos momentos de su historia, su ubicación original, extramuros lejos del área urbana consolidada...”.
Espacio para el nuevo cementerio
Un predio ubicado en el sector de Santa Teresita de Monay, frente al camposanto Santa Ana, es el que está destinado para la construcción de la nueva necrópolis.
El sitio le pertenecía a la Arquidiócesis de Cuenca y fue expropiado por alrededor $ 700 mil. A inicios de año el Municipio recibió el pronunciamiento favorable. “Tenemos un espacio, aún no hay una posición oficial al respecto, pero para el próximo año tendremos más claro ese asunto”, dijo la gerente de la Emuce EP.