El destino les tuvo deparada una oportunidad más para  aprender dentro de su trabajo. Andrea Campoverde y Mauricio Segovia, quienes laboran como agentes de tránsito en Cuenca, desde hoy, en Dallas, Estados Unidos, serán parte de un curso de capacitación en radares.

Ambos alcanzaron las mejores calificaciones en un concurso interno realizado por la Empresa Municipal de Movilidad (EMOV) .

Se trata de un evento realizado por la empresa Applied Concepts Inc., en el que estos dos cuencanos recibirán todas las indicaciones relacionadas a la utilización e instalación del software de radares de alta tecnología.

Los uniformados contarán con esos equipos desde este año. Andrea tiene 26 años y es ingeniera comercial. Tras haber culminado sus estudios en la Universidad de Cuenca, en 2011, empezó a trabajar como cajera en una reconocida cooperativa de ahorro y crédito de la ciudad.

Su sueño de brindar un servicio a la comunidad fue el que la impulsó para inscribirse en el concurso de la empresa municipal. “Siempre tuve el sueño de ser uniformada y trabajar con la gente. El cambio de laborar en la cooperativa es tremendo, pero siento que escogí el mejor camino. Este curso que voy a recibir me servirá para seguir aprendiendo en lo mío, para seguir aquí y, con el tiempo, ejercer mi profesión dentro de la empresa”, comentó.

Dentro de la EMOV, desde abril de 2013 que empezó a laborar, se ha desempeñado como integrante de patrulla y servicio pedestre.

De estas dos opciones la que más llena sus expectativas es realizar patrullajes, pues esto le permite usar los equipos de monitoreo. “Es emocionante trabajar en cualquier parte porque se sabe que uno puede ayudar con la ciudad”, acotó.

Mauricio, cuya historia es similar a la de Andrea, tiene 27 años y le agrada trabajar para la ciudadanía; tal como su compañera, antes desempeñaba una ocupación totalmente diferente: era supervisor de cajas en una entidad bancaria.

Además, estaba estudiando derecho e ingeniería en administración de empresas. Comentó que no dudó inscribirse para el concurso de agente civil de tránsito, pues desde que era pequeño le gustaba el trato con las personas y vio  esta labor como una opción para seguir creciendo en lo profesional.

Ser como un héroe para sus hijos, Maryuri, de 7 años, y Josué, de 5, es una de las motivaciones más grandes que tiene este cuencano para continuar laborando en las calles, en aras de la seguridad vial. “Cuando llego a la casa me abrazan y sienten que uno es como Superman u otro de esos personajes de la pantalla”, agregó.

Sobre el curso que inicia hoy, Segovia, considera que será fundamental aprender todo lo concerniente al manejo e instalación del sistema de los radares, por cuanto un error en estas aplicaciones puede ser lapidario, por los costos que representaría dañarlos. “Hay que aprender desde qué amperaje manejan los radares hasta cómo se instala el software. Lo que se utilizará en Cuenca es tecnología de punta y vamos a prepararnos para poder garantizar su utilización y capacitar a nuestros compañeros”, manifestó.

El curso durará hasta el próximo viernes, luego de ello Andrea y Mauricio deberán compartir sus conocimientos con el resto de colegas que laboren en las patrullas utilizando este sistema.

Otras capacitaciones

Darío Tapia, gerente de la EMOV, informó que en estos días decenas de agentes civiles forman parte de cursos de aprendizaje en materia de accidentología y peritaje de accidentes de tránsito.

Los vigilantes asisten de 17:00 a 22:00 a las aulas de la Universidad Católica de Cuenca para prepararse y  ayudar a la comunidad.

Para el 17 de este mes está prevista una nueva convocatoria para los aspirantes a ocupar estos cargos. Quienes califiquen trabajarán en las parroquias rurales.

En el último llamado, realizado a finales del año anterior, solo 6 personas de 2.710 postulantes calificaron para enrolarse en el trabajo de agentes de tránsito.

Los otros inscritos no cumplieron con los requisitos y por ello se convocará a otro concurso.