Dos días después de haberse registrado un incendio en el viejo seminario San Luis, cuyo edificio fue construido en 1890, comenzaron ayer a removerse los escombros para posteriormente realizar la reconstrucción.  

La primera acción fue establecer una coordinación interinstitucional con el propósito de definir acciones inmediatas para el direccionamiento de las medidas.

El Comité Técnico Emergente está conformado por el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), el programa S.O.S. Patrimonio del Ministerio Coordinador de Patrimonio, la Secretaría Provincial de Riesgos, el Municipio de Cuenca y el Ministerio de Cultura con la Subsecretaria de Patrimonio.

Este buró tiene la finalidad de fortalecer los frentes de intervención en la primera fase -calificada como prioritaria-  que determinará, sobre la base de los informes de diagnóstico estructural y de afectación presentados por la Municipalidad de Cuenca, la Secretaria de Riesgos e Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, tres acciones prioritarias a ejecutarse desde ayer.

En ellas está lo siguiente: Determinar la ejecución de sobrecubierta provisional para la protección de la crujía central que albergaba la Capilla San Luis, así como la crujía norte hacia la calle Bolívar, constituyendo alrededor de 2000m2 de área de intervención que ejecutará el programa S.O.S. Patrimonio del Ministerio Coordinador de Patrimonio, con los lineamiento del comité técnico emergente.

Para garantizar la protección de la edificación, así como la de los transeúntes del sector, se determina la ejecución del cerramiento provisional de la edificación patrimonial hacia las calles Bolívar y Benigno Malo, además de la verificación de las redes de instalación eléctrica y de evacuación de agua lluvia de todo el conjunto patrimonial. 

Para esta acción se cuenta además con los apoyos institucionales en lo referente a los materiales a utilizar y el recurso humano comprometido. Así mismo, a partir de hoy se iniciará el retiro y desalojo de escombros previamente definidos por el comité técnico emergente.

Uno de los tema más sensibles constituye la protección a los usuarios de los locales comerciales de la zona de riesgo ubicados en las calles Bolívar y Benigno Malo, lo cual estará liderado por la Secretaría Provincial de Riesgos.

Estas acciones fueron tomadas tras el flagelo, cuyas llamas permanecían hasta este jueves, lo que provocó que aún quedasen maderas quemadas, puertas inservibles y sobre todo un tumbado destruido por efectos de las llamas. 

Según el gobernador de la provincia, Humberto Cordero, son 2.200 metros cuadrados los que fueron afectados en la noche del miércoles anterior.  

De esta forma, los locales comerciales que suman 11 no podrán momentáneamente ser utilizados por sus inquilinos debido a que el piso superior quedó con fuertes daños y eso hace que peligre la estructura. “Todo eso está dañado y tiene que entrar en reparación”, dijo el funcionario. 

Para el propietario del restaurante Raimipamba son pérdidas incalculables las que está registrando su local. “Recibo 500 personas diariamente para el almuerzo y merienda”, dijo, tras indicar que se debe también dar alternativas para  no tener más pérdidas económicas.

Según el gobernador, en una intervención provisional se invertirá $120 mil, pero en la  general el monto alcanza a los $3.5 millones. “En la provisional los montos están liberados y serán transferidos de manera inmediata, señaló”. Desde la Gobernación  ya existe una propuesta para cuando termine la reconstrucción. 

Hacer un cambio general en lo que respecta al arriendo de los locales “será un patrimonio de Cuenca y del país, por lo tanto, tenemos que coordinar con la Municipalidad y otros organismos”, dijo Cordero, agregando que el espacio tiene que tener un nuevo uso del suelo. “Sabemos que es un tema sensible, estaban arrendando y pagando, nosotros veremos todo eso para no interrumpir su trabajo”, acotó el representante del Ejecutivo.

De su lado, Ruth Caldas, encargada de la alcaldía, señaló que tras las primeras reuniones “sabemos que el Gobierno nos da el apoyo incondicional y absoluto para que realicemos el arreglo del seminario”. Hasta ayer la calle Bolívar que da a la entrada del seminario permanecía cerrada al tráfico.