Publicidad

Ecuador, 16 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Comparte

Pescadores de San Mateo celebran sus fiestas

En esta comunidad mantense hay aproximadamente 2.500 pescadores. Foto: Rodolfo Párraga / EL TELÉGRAFO
En esta comunidad mantense hay aproximadamente 2.500 pescadores. Foto: Rodolfo Párraga / EL TELÉGRAFO
30 de octubre de 2015 - 17:32 - Redacción Manta

Luis Pico lleva en el oficio de pescador tres décadas. Como todos los años hizo un receso en su actividad para ser parte de la Fiesta del Pescador Artesanal, que se celebra en San Mateo desde  el 28 hasta el 31 de octubre. Él fue parte del desfile que se realizó hoy donde participaron los hombres que faenan en el mar así como damas de la comunidad.

Belkis Delgado, presidenta de la Cooperativa de Producción Pesquera Artesanal "Damas de San Mateo",  dijo que con estos eventos, que siguen mañana como la procesión de la Virgen María, se resalta el trabajo del pescador, que aporta con su producción a la economía a nivel del país.

En esta comunidad mantense hay aproximadamente 2.500 pescadores, de ese número el 70 % aprovecha quedarse en tierra para disfrutar de las jornadas planificadas en estos días, donde hay además juegos, elección de reina y baile.  

Delgado durante su intervención pidió reuniones de trabajo con entidades que tienen que ver con la actividad del pescador.  

El alcalde de Manta, Jorge Zambrano, resaltó  la ardua labor de los hombres que laboran en el mar. “Estamos trabajando para que sus familias mejoren sus condiciones, luchando para producir más agua potable, eso lo vamos a lograr en los próximos tiempos en todos los sectores”, indicó.

Durante la sesión solemne se entregaron reconocimientos.

El pescador Bolívar Pachay dijo que aunque lleva 5 años que dejó la actividad de la pesca le gusta recordar aquellos tiempos siendo parte de las festividades.

Washington Anchundia, ciudadano mantense, explicó que él quería conocer de cerca la labor de los pescadores, es así que decidió un día irse a la faena.  “Es una tarea bien sacrificada, más cuando el trabajo es más en la noche, hay choque de olas que mojan y uno pasas frío. Al regresar y estar cerca de la ciudad se siente una alegría de reencontrarse pronto con la familia”, señaló. (I)

Contenido externo patrocinado