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Ceniza cayó en poblados
Nubosidad dificulta el monitoreo visual de la actividad del volcán Tungurahua
La espesa niebla que cubre al volcán Tungurahua, casi a diario, complica las tareas de monitoreo y seguimiento visual que los vigías del coloso realizan durante el día.
Así lo afirmó Carlos Sánchez, vigía voluntario de la estación de monitoreo Ventanas, ubicada en Runtún, del cantón Baños.
“Aunque no es la única técnica que se aplica para analizar el comportamiento, la observación nos ayuda enormemente. Cuando no hay buena visibilidad, las opciones de seguimiento que se aplican emplean instrumentos para medir la toxicidad de los gases expulsados, sismógrafos y medidores de ceniza, entre otros”, explicó Sánchez.
Mientras tanto, el último reporte del Observatorio del Volcán Tungurahua (OVT) informa que la actividad del macizo, se mantiene en un nivel de moderado a alto.
Se han detectado varias explosiones y caída de ceniza en los poblados de Mocha y Choglontus.