Alrededor de 600 jóvenes participan continuamente en diversas actividades que motivan a la sociedad local a desarrollar una cultura de ahorro del agua potable en  Riobamba.

Las autoridades esperan que estos eventos y el precio del servicio, que observan los usuarios en su factura mensual, sirvan para frenar el desperdicio del líquido vital.

Tanto en las calles como en los hogares riobambeños este recurso se utiliza desmedidamente. Es lo que se observa, por ejemplo, en el lavado de los automóviles. Según los expertos, al usar una manguera común el propietario desperdicia unos 100 litros en menos de 10 minutos.

Sin embargo, si se realiza la misma actividad empleando baldes plásticos se ahorrarían 50 litros,  aunque eso signifique tomar  más tiempo para limpiar el vehículo.

De ahí que los estudiantes encargados de concienciar a la comunidad sugieren la utilización de mangueras con boquilla o el uso de una lavadora a presión.“Estos implementos permiten también ahorrar, pues de la boquilla no sale tanto caudal, además como se lava a presión la fuerza es lo que desprende la mugre del vehículo. A veces solo debemos ingeniarnos métodos para cuidar de algo tan valioso como es el agua limpia”, dijo Claudio Rojas, uno de los estudiantes que es parte de esta campaña que, por ahora, es la única en las provincias de la región centro.

Lo que dicen los estudios

Según indagaciones emitidas por la Empresa Pública de Agua Potable y Alcantarillado de Riobamba (Ep-Emapar) una persona necesita unos 150 litros de agua por día para realizar todas sus actividades.

Lo que incluyen 12 litros de agua para  consumo en la alimentación, (preparación y jugos); otros 50 litros para la ducha, si se permanece en ella alrededor de 5 minutos. En esto último lo recomendable es asearse en 3 minutos.

También, de 12 a 20 litros en el sanitario, si este no posee un mecanismo de desplazamiento, la sugerencia para el usuario es la utilización de un modelo dual que emplee 4 litros; y 2 litros de agua para consumo de aquellas personas que de forma continua beben el líquido vital como parte del cuidado de su salud. Los 50 litros sobrantes son para distintas actividades.

Los usuarios en Riobamba

En la capital chimboracense existen 41 mil usuarios que pagan por el metro cúbico de agua $ 0,48. La factura mínima a pagar es de $ 10,19, dependiendo del uso esta cantidad podría aumentar.

Víctor Méndez, gerente de la Ep-Emapar, indicó que aunque los 150 litros son suficientes para una persona por día, existen reportes de que se utilizan de 250 a 300 litros en el mismo lapso. “El desperdicio es muy fuerte en la localidad. La gente no se da cuenta de que puede economizar de distintas maneras. Al cerrar los grifos o al instalar dispositivos que les permiten optimizar el recurso. De nuestra parte hemos realizado varias campañas para concienciar”, manifestó Méndez.

Debido a la exageración en el uso de este servicio básico varias personas han visto incrementos importantes en sus facturas mensuales y muchos han dejado de pagar por varios meses, por lo que la institución inició el cobro de la denominada cartera vencida.

Se calcula que alrededor de $ 2 millones deberán ser recuperados del bolsillo de personas que no han cancelado del agua por varios meses. Sin embargo, lo que más preocupa a las autoridades es el desperdicio sin sentido del líquido. “Son personas que se dejan acumular por más de 6 meses. Pedimos que se acerquen a realizar convenios de pago, o lo más importante ahorrar  el agua”, manifestó Hugo Fernández, director comercial.

Se espera que las campañas lleguen hasta la conciencia de las personas y eviten el corte del servicio por falta de pago y busquen mecanismos para pagar menos y conservar este preciado bien. (I)

DATOS

Para ahorrar agua y dinero los expertos recomiendan cerrar el grifo de agua mientras se cepillan los dientes, se jabona la cara o al afeitarse.

Colocar 2 botellas plásticas llenas dentro de la cisterna para ahorrar de 2 a 4 litros cada vez que la utilice. No emplear el inodoro como basurero, recuerde que además esta costumbre podría dañarlo.

Ducharse en lugar de bañarse, de ese modo se pueden ahorrar hasta 150 litros cada vez, más aún si es una familia numerosa. Arreglar las averías de grifos y cañerías. Un grifo que gotea pierde 30 litros diarios

Llenar la lavadora y el lavavajillas, pues ahí es donde más se gasta. El agua del segundo aclarado puede emplearse para regar las plantas del jardín o juntarla en baldes para luego lavar el automóvil y las moquetas.