El proyecto empezó en 2011
La cría de truchas es una opción por el daño que causa el volcán
Por cerca de 15 años, las familias que viven cerca del volcán Tungurahua han soportado la ceniza y las periódicas reactivaciones del coloso. El polvo afecta sus sembríos y desequilibra la economía.
Por eso, grupos familiares empezaron a criar truchas para la venta y preparación a lo largo de la vía Penipe-Baños.
Es lo que ocurre en Bilbao, Puela, Matus y Guso de Penipe. Allí, el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), incentiva esta actividad para luego comercializar los productos en los mercados de Penipe y Riobamba.
En Bilbao, 40 familias también ofertan frutas, pinchos de carne y de pollo, para mejorar sus ingresos.Gonzalo Paz es uno de los beneficiados en la comunidad Guso, a 10 minutos de Penipe. Empezó a criar truchas en 2011. Hoy cuenta con 7 piscinas y el agua proviene de los ríos Matus, Calshi y Asacucho. “Hace unos días sembré 6 mil alevines y espero en 3 meses contar con 1.200 kilogramos de pescado. Para esto, la capacitación de los técnicos del Magap fue vital”.
Gracias a esto, Paz y sus vecinos saben cuándo es el momento adecuado para colocar los alevines y el manejo de su crianza, con la cual han conseguido sacar al mercado un producto sano y de buen sabor.
Un kilogramo equivale a 4 peces y cuesta 4,50 dólares. “Nuestro principal lugar de venta es la feria que organiza el ministerio en Riobamba. Nuestros peces son orgánicos y eso gusta a la gente”, aseguró.
En la parroquia Matus, Gonzalo Mariño ofrece a los turistas, las truchas preparadas, mientras visitan el mirador Utuñag para observar al volcán Tungurahua. “Tenemos 3 piscinas para que los visitantes pesquen y después las cocemos y se acompañan con ensalada y papas fritas. El domingo es el día que más visitantes tenemos. Sin duda esta otra alternativa de progreso”, aseguró Mariño.