Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), Ambato es, después de Salvador de Bahía (Brasil) la ciudad de América Latina con el aire más limpio, seguida por Ibarra, al norte de Ecuador. Este dato es el resultado del estudio que el organismo desarrolló en 1.600 ciudades de 91 países de todo el mundo, de 2008 a 2012.

El último estudio que midió la calidad del aire en Ambato fue realizado en 2008 por el Cabildo y contó con el apoyo de Petroecuador y la Universidad Central de Quito.

Los resultados que arrojó este análisis fueron alentadores, pese a que año tras año 5 mil vehículos nuevos se suman a los 40 mil que ya circulan cada día por las calles céntricas de Ambato.

El muestreo y la medición que realizaron los técnicos se denomina Oraqui, un método que clasifica al aire en los siguientes niveles: de 0 a 10, aire limpio; de 10 a 50, aire moderadamente contaminado; de 50 a 100, contaminado y de 100 en adelante, muy contaminado.

Ambato registró una variable de 18 a 145, con mayor afectación en el centro de la ciudad y con incrementos considerables en horas pico, 07:00, 13:00 y 18:00.

Los datos demuestran que la polución se acentúa en zonas de alto tráfico vehicular y en horarios determinados.

El monóxido de carbono, oxidantes fotoquímicos, óxido de nitrógeno y dióxido de azufre son las sustancias que más afectan, especialmente en zonas transitadas por unidades de transporte urbano.

Un ejemplo de esta situación se produce en la calle 13 de abril, una arteria que conecta el centro con la zona alta (avenida Atahualpa) y por la se movilizan a diario unos 800 buses de diferentes líneas urbanas y rurales.

Este elevado número de unidades, sin contar con los vehículos particulares, crea una nube contaminante que tiñe de negro las paredes de las construcciones del sector, lo cual además de ser nocivo para la salud, representa un problema estético para el lugar.

“Creo que la nueva administración debería buscar una solución inmediata al grave problema de contaminación de esta calle, pues esto afecta a más de 2 mil personas que residimos cerca”, exigió Eduardo Guamán, quien recordó que hace algún tiempo se habló de retirar los buses del centro, “creo que es la mejor opción, pese a que no será fácil su aplicación, porque afecta directamente a las cooperativas de buses”, comentó.

De otro lado, en sectores residenciales como Miraflores, Ficoa, Atocha, Nueva Ambato, Ciudadela España, Izamba, Barrio Obrero, Huachi Chico y La Península, entre otros, los niveles de contaminación no superan los 60 puntos.

En sectores rurales, la acción purificadora de las áreas verdes y zonas boscosas ayudan a mantener el ambiente más limpio y libre de gases tóxicos que afectan la salud.

El creciente parque automotor de Riobamba amenaza la calidad del aire de esta urbe, considerada la segunda de la región con 225.741 habitantes.

Esta es la conclusión de un estudio que realizaron en 2010 técnicos del Ministerio del Ambiente del Ecuador (MAE) mediante el Plan Nacional de la Calidad del Aire (PNCA).

En 2012, el MAE promovió la ejecución de los inventarios de emisiones contaminantes de 9 ciudades del Ecuador entre las que está Riobamba, tomando como base la indagación efectuada 2 años antes.

Según el estudio hay diferentes contaminantes. En los parámetros de investigación se destacan emisiones generadas por las industrias, por disolventes, gasolineras, gas licuado de petróleo (GLP) (uso doméstico) y por las caleras (producción artesanal de la piedra caliza).

El resumen de emisiones atmosféricas de Riobamba señala que los mayores contaminantes son el dióxido de nitrógeno (gas oxidante que proviene de la combustión de los automotores) con el 79,3% y el monóxido de carbono con el 96,2%, que proviene también de los escapes de los carros.

Lo que coloca al parque automotor como la principal fuente contaminante del aire en la ‘sultana de los Andes’, ya que la mayoría de vehículos motorizados utiliza combustibles fósiles como gasolina y diésel.

En 2010, las estaciones de servicio de Riobamba adquirieron 15’075.269 galones de gasolina extra, 2’792.000 galones de gasolina súper y 12’977.834 galones de diésel. Según el MAE, este último es uno de los más contaminantes porque produce de 10 a 100 veces más partículas de combustión que los autos a gasolina.

De acuerdo con informes de la Dirección de Planificación del Municipio de Riobamba, la ciudad mantiene un parque automotor que bordea los 50 mil vehículos.

Según registros de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), en la zona urbana hay 18 rutas de buses urbanos que llegan hasta la parada cada 5 minutos en horas que no son congestionadas (09:00 a 11:00) y cada 3 minutos en horas catalogadas como pico (07:00, 12:00, 18:00), generando así emanaciones del combustible durante un largo periodo del día.

Sin embargo, en la contaminación vehicular interfieren otros aspectos como el peso de los vehículos, capacidad, diseño, funcionamiento de los motores, dispositivos de control de las emisiones, características de la red vial y el año de fabricación.

En el caso del transporte público, según la resolución 36 de febrero de 2013 de la ANT, los buses de rutas urbanos o rurales deben tener un máximo de 20 años de vida útil (es decir, desde 1995).

El estudio sobre la contaminación del aire en Riobamba continúa este 2014 y tiene planificado investigar las emisiones que generan los incendios forestales, asaderos, actividades agrícolas y ganaderas. Además el documento incluirá recomendaciones sobre el cuidado del aire en la localidad, tanto para los municipios como para los ciudadanos.