3 mil personas protestaron en Ambato contra el comercio informal
La histórica esquina de las avenidas Unidad Nacional y Cevallos, de Ambato, donde empiezan los desfiles cívicos y festivos de la ciudad, ayer fue escenario de una masiva concentración.
Al menos 3 mil personas llegaron al lugar, a las 07:30, para protestar contra la venta ambulante de varios artículos, entre ellos zapatos, que se realiza a diario en las proximidades del casco urbano.
Se trataba de los miembros del Frente de Productores y Comerciantes de Calzado, Cueros, Textiles y Afines de la provincia, además de propietarios de locales en varios mercados de la ciudad, quienes están en contra del comercio informal.
“Quienes expenden en las calles no pagan impuestos ni alquiler de cubículos y puestos en plazas y mercados. Esto representa una clara competencia desleal”, explicó Mery Miranda, presidenta de la Asociación de Comerciantes de la Plaza 1 de Mayo.
Ella y sus colegas calzadistas avanzaron más de 15 bloques del centro ambateño hasta el Municipio, donde, a las 09:00, se inició la sesión del Concejo Cantonal. Lo hicieron con carteles con mensajes como: “Mayor control al expendio callejero”, “El contrabando mata al sector calzadista” y “Equidad en el comercio, no más competencia desleal”.
Peticiones
Bertha Narváez, vicepresidenta de la Asociación de Calzado 5 de Junio y secretaria del Frente de Productores y Comerciantes de Calzado, y una delegación de comerciantes formales ingresaron al Cabildo para exponer su punto de vista.
“Nos sentimos inconformes y afectados por los vendedores ambulantes que a diario laboran en el casco urbano de nuestra ciudad. De forma directa solicitamos se busque una solución definitiva para este problema, que por cierto en algunos sectores involucra a mercaderes extranjeros”, dijo.
Mauricio Carvajal, presidente de la Red de Plazas y Mercados de Ambato, secundó esta petición y, además, solicitó que los controles sean continuos.
“En las calles las ventas no paran, mientras al interior de los centros de expendio la mercadería se perenniza en las estanterías. La informalidad nace en los alrededores de la Plaza 1 de Mayo, por lo cual se debe investigar el problema en este lugar”, argumentó Carvajal.
Por su parte, el alcalde Luis Amoroso sugirió organizar en los próximos días una reunión con los involucrados en el tema.
“He recibido de los calzadistas el documento donde se explica su situación. No obstante, es necesario aclarar que este problema no se originó en esta administración, se lo arrastra varias décadas. Hay planes para aminorar los efectos de la informalidad, como la reconstrucción del mercado Juan Cajas y la posible adquisición de un predio cerca de la Plaza 1 de Mayo; esto último costaría cerca de $ 4 millones”, indicó el burgomaestre. (I)