Problemas logísticos de la ONU causaron malestar en turistas nacionales y extranjeros
Los zapatos de taco de aguja de Mayte Asha, de Argentina, se volvieron un suplicio en la espera de más de tres horas que debió sufrir para poder ingresar a la conferencia Hábitat III. La mujer llegó a las 08:00 y pretendía acudir a la inauguración de la cita, pero a las 11:30 (una hora después) recién se encontraba en la avenida Patria, en una fila que arrancó en la 10 de Agosto y que bordeaba el parque El Ejido.
Llevar una sombrilla, bloqueador solar, abundante agua y zapatos cómodos fue el detalle que olvidó sugerir la Organización de Naciones Unidas (ONU) a los visitantes nacionales y extranjeros que tuvieron que esperar por más de tres horas para poder ingresar.
La ONU habilitó un solo ingreso al encuentro, a través del parque El Ejido. En este sitio se colocaron seis hangares de seguridad con detectores de metales. Todos estos lugares estuvieron custodiados por la ONU. Los policías de esta organización hicieron ingresar a los turistas nacionales e internacionales por grupos de 10 personas. A quienes quedaban por fuera les cerraban la puerta. “No puede entrar, espere”, les gritaban los guardias de la ONU.
Las filas iban desde la avenida 6 de Diciembre, pasando por la Patria, hasta la Caja del Seguro (centro-norte de Quito). Quienes llegaron a las 08:00 recién a las 11:30 pudieron ingresar. Marlyn Rodríguez llegó desde Bogotá con sus compañeros de la carrera de urbanismo de la Universidad Nacional de Colombia. “Desde el viernes intentamos acreditarnos y hasta ahora no podemos; gastamos pasajes, hospedajes y llevamos tres días sin poder ingresar”.
El presidente Rafael Correa pidió disculpas por los problemas. Señaló que la ONU es la encargada. Peter Thompson, presidente de la Asamblea general de la ONU, también se disculpó y dijo que se tomarán los correctivos necesarios.
Andrés Otañez es de República Dominicana y “en ningún otro país he visto tremenda desorganización y maltrato”. La espera benefició a vendedores de paraguas en El Ejido. María Chiluisa comercializó 50 sombrillas a $ 10 cada una. En las afueras del parque El Ejido se apostaron grupos de artesanos.
Hubo quienes aprovecharon: “Money, foto”, increpaba un comerciante de caricaturas en discos, a quien quisiera tomar una foto. En las avdas 10 de Agosto, Amazonas, 6 de Diciembre, 12 de Octubre y Patria hubo tráfico. El cierre de la avenida Queseras del Medio trajo problemas a quienes iban hasta el valle de Los Chillos.
Ya en el interior, luego de más de 3 horas de espera de pie y en el sol, el stand de expendio gratuito de agua fue el más visitado. Mayte entró con los zapatos en la mano. (I)
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Los precios de los alimentos se encarecieron
Sitios de comida al interior de Hábitat III duplicaron el costo de sus productos
Los participantes de Hábitat III se quejaron del costo de los alimentos que se comercializan al interior de la conferencia. Los valores se duplicaron. Foto: John Guevara / El Telégrafo
Con el pretexto de que es un evento internacional y de que es territorio de las Naciones Unidas, los precios en los sitios de comida rápida instalados en carpas y en islas se dispararon, afectando la economía de los asistentes que por la dificultad de salir a comprar tenían que adquirir alimentos a tres veces su valor real. En el interior de Hábitat III, por ejemplo, un sándwich cuesta entre $ 9 y $ 10, cuando afuera ese mismo producto tiene un precio de entre $ 4 y $ 5.
Así también, los rollos de sushi costaban hasta $ 22; un almuerzo, $ 15; y una botella de agua, $ 2,50. También los cebiches, que cuestan cerca de $ 6, valían entre $ 10 y $ 11.
Muchos visitantes nacionales y extranjeros se quejaron del costo de los productos, como Carlos Bahamonte, de Azuay, a quien le pareció excesivo. “Deberían controlar el valor de los productos, no está bien que a la gente quieran verle la cara”. Sin embargo, a la mayoría le tocó comprar allí porque salir significaba volver a realizar una fila de más de 3 horas para volver. (I)
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El pabellón de Quito no funcionó
Pabellones de ONU y Ecuador recogen el trabajo en urbanismo y medio ambiente
El pabellón de la ONU exhibe imágenes sobre las acciones que realiza la entidad a favor del medio ambiente, el urbanismo y el desarrollo sustentable. Foto: John Guevara / El Telégrafo
Al interior del parque El Arbolito se construyeron tres pabellones con exposiciones sobre Ecuador, Quito y el trabajo que realiza la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Desde las 11:00 de ayer se prohibió el ingreso al pabellón de Quito. Según el personal de seguridad, el alcalde Mauricio Rodas tuvo prevista una rueda de prensa para la firma del proyecto de Quitocables y por ello este permaneció cerrado hasta las 14:00.
Sin embargo, los pabellones ONU y Ecuador sí estuvieron habilitados. En este último se exhibe la cultura y tradiciones ecuatorianas. Hay una exposición de piezas arqueológicas de la cultura Jama-Coaque, Bahía, La Tolita, así como de los saberes y rituales de los antepasados.
En la segunda parte, en cambio, se exhiben las acciones que emprendió el gobierno nacional tras el terremoto del 16 de abril, que afectó a 6 provincias y dejó más de 600 muertos. También se presentan los trabajos ganadores del concurso que se implementó en las universidades sobre desarrollo urbano sostenible, en donde participaron más de 400 proyectos.
En cambio, el pabellón de la ONU refleja el trabajo que realiza la organización a nivel mundial sobre cuidado del medio ambiente y respeto a la biodiversidad. En este lugar se venden recuerdos del Hábitat III como jarros, camisetas, tomatodos y cuadernos, cuyos costos van desde los $ 6 hasta los $ 15. (I)