A menos de un año de cambio de autoridades seccionales, ¿cómo mira la gestión en Quito? 

Veo un problema originado en varios factores: esta especie de divorcio entre el Alcalde y el Concejo.
Ahí todos tienen la culpa. Esa falta de relación, de empujar el proyecto en la misma dirección causa problemas al funcionamiento del Concejo y de la ciudad.

¿Estas diferencias políticas ahondaron la separación entre el Concejo y el Alcalde?

Nunca antes en el Concejo hubo posición de partidos políticos ni en apoyo ni en oposición al alcalde.
Al Concejo llegábamos por un partido, pero apoyábamos un proyecto de ciudad.
Creo que aquí también hay un error en una de las modificaciones a la Ley de Régimen Municipal. Ahora los concejales son de tiempo completo, tienen sueldo, eso no es bueno. Porque tienen un grupo de concejales que está más de ocho horas diarias, preocupándose en hacer algo y ese algo puede terminar interfiriendo en la administración.

¿El trabajo de la fiscalización con o sin sueldo debía ser realizado por un concejal?

La fiscalización es relativa. Muchas veces se intenta fiscalizar la labor que ellos mismos realizan. Los concejales no deben participar en la administración.

¿Qué le queda debiendo esta administración a la ciudad?

Un poco más de generosidad mutua para que lo que cada uno cree se ponga a un lado en beneficio del proyecto de la ciudad. Que no interfiera en los proyectos que se paran por estos problemas internos que han habido.

¿La revocatoria de mandato es lo más adecuado?

Es una locura. No tiene ni pies ni cabeza.

¿Cuál es el error más grave del Alcalde y del Concejo?

De lo que se ve hacia afuera, han sido estas discrepancias y bloqueos permanentes de ambos lados que no conducen a ningún lugar.

Hay una mayoría en el Concejo: la de independientes, ¿a qué responde esto?

Este tema se ha dado por primera vez en el Concejo. Antes había grupos conformados por los partidos de origen y así se mantenían. Estas independencias eran raras. Pero creo que solo pasó en el Concejo de Quito, no en el resto del país. (I)